Comisiones Obreras de Castilla y León ha alertado hoy sobre las intenciones de Panrico de desmantelar la factoría ubicada en el polígono industrial de San Cristóbal y que cuenta con doscientos trabajadores.

De hecho, ya ayer jueves tuvo lugar una reunión entre representantes del comité de empresa y el director general de RRHH de la panificadora, Jesús García, en la que éste mostraba un panorama muy negro para la factoría local debido a la pérdida de competitividad, frente a otras empresas de su mismo sector como el propio Grupo Siro.

"Este hombre nos anunció la necesidad de ser más competitivos y para ello nos dijo que se necesita revisar y adecuar las actuales condiciones salariales de la plantilla. También nos manifestó la importancia de conseguir ayudas públicas. Vamos, utilizando eufemismos muy finos, nos vino a decir poco más o menos, a modo de advertencia, que el cierre de la planta está ahí", ha explicado Juan Manuel Ramos, secretario regional de la Federación Agroalimentaria de CC.OO de Castilla y León, a través de un comunicado.

Con relación a la pérdida de competitividad, los representantes de CC.OO transmitieron al responsable de Recursos Humanos que igual el problema no estaba en los honorarios "sino en unas instalaciones vetustas, donde no se ha invertido nada en mucho años. Y ahora quieren que paguemos el pato los trabajadores y trabajadoras. Eso no es justo y no estamos dispuestos a permitirlo", ha apuntado el máximo responsable de esta Federación.

El próximo jueves día 12 de julio está previsto un nuevo encuentro entre la dirección y la representación de los trabajadores para aclarar las reales pretensiones de la empresa de origen catalán, pero que en la actualidad es propiedad de un fondo de inversión norteamericano.

Estrategia de empresa

"Esta planta cuenta con cerca de 200 operarios y les hemos dicho que estén alerta, pero sin alarmarse. Que no cunda el desánimo y el pesimismo. Lo que nos tememos es que todo obedece a una estrategia bien clara para reducir los honorarios de la plantilla, como ya hicieron en la sede central de Santa Perpetua (Barcelona). Y por eso no podemos pasar", apunta Ramos.

El Grupo Panrico cuenta con fábricas en Murcia, Sevilla, Córdoba, Galicia, Barcelona, Madrid y Valladolid. Los nuevos propietarios de la empresa ultiman un plan estratégico que conllevaría el cierre de tres fábricas en toda España. Esta decisión ha hecho saltar las alarmas en la planta vallisoletana, ubicada en el polígono de San Cristóbal, ante las posibilidades de que sea una de las afectadas.

Para CC.OO sería un grave error el cierre de la planta vallisoletana ya que cuenta con unos ratios de producción superiores a las de otras factorías del grupo y destacan que aún no han recibido una propuesta concreta de la empresa. No obstante, sí que se ha comunicado en el Comité Intercentros de Panrico la elaboración de dicho plan estratégico, que aún no han trasladado a los representantes de los trabajadores.

El año pasado Panrico, con una plantilla de 2.182 trabajadores, tuvo luz verde del Ministerio de Trabajo para aplicar un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) temporal que afectó a 765 operarios de sus fábricas en Santa Perpetua de Mogoda (Barcelona), Paracuellos del Jarama (Madrid), Sevilla y Murcia, así como a 28 empleados de delegaciones comerciales.

El expediente tuvo una duración de 180 días, aunque en las fábricas se aplicó de forma rotatoria mediante una fórmula de reparto de los días de suspensión entre los trabajadores afectados en función del excedente determinado en cada centro de trabajo.

El número concreto de afectados fue de 272 trabajadores en Santa Perpetua de Mogoda, 213 en Paracuellos del Jarama, 161 en Sevilla y 119 en Murcia. Quedaron excluidas del ERE las factorías de Valladolid, Puente Genil (Córdoba) y Santiago de Compostela.