La población de animales que habita en la zona del parque de naturaleza y animales Terra Natura Murcia, que recrea la sabana africana, ha aumentado con el nacimiento de dos crías de cebra.

Se trata del séptimo y octavo parto que se produce en el complejo de naturaleza de esta especie. En estos momentos, las crías recorren libremente la pradera sin separarse de la atenta mirada de sus respectivas madres.

Nada más nacer, los dos ejemplares registraron un peso aproximado de unos 14 kilos y midieron cerca de 50 centímetros de altura, que es la medida habitual que suelen tener las crías de esta especie. A diferencia de los adultos, tienen las rayas de su pelaje de una tonalidad marrón que dentro de unos meses se convertirá en negro.

Las dos madres se muestran muy protectoras con sus potros, hasta el punto de que si perciben que cualquier animal se acerca demasiado a las crías les atacan para defenderlas. Las cebras hembra deben completar una gestación de unos ocho meses para poder tener a sus crías.

Durante el primer año de vida, las crías se alimentarán de leche materna y conservarán el vínculo con su progenitora, aunque más adelante complementarán su dieta con la ingesta de hierba y pienso. Actualmente, el parque Terra Natura Murcia cuenta con un grupo de cebras de 11 ejemplares, seis de ellos macho y cinco hembras.

Una de las características más llamativas de la morfología de las cebras son sus rayas negras. Su cuerpo se asemeja al de los caballos, aunque sus dimensiones son inferiores.

La posición de sus ojos, situados a los lados de la cabeza, les confiere un ángulo visual muy amplio que además optimizan gracias a su excelente sentido de la vista que poseen, según el complejo murciano.