El Grupo Socialista en el Ayuntamiento de Valladolid llevará una moción al Pleno municipal del próximo martes, 3 de julio, en la que reclamará la renuncia a la contratación de un asesor ferroviario para Alcaldía y la asunción de las funciones que se le encomiendan por parte de técnicos municipales.

Según ha informado el PSOE en un comunicado, y como ya advirtió el Grupo de Izquierda Unida esta semana, el nuevo contrato de asesoramiento técnico al alcalde para la operación ferroviaria 'Valladolid Alta Velocidad', acordado en la Junta de Gobierno del pasado viernes se traducirá en un gasto de 193.000 euros en cuatro años.

En opinión del portavoz del Grupo, Javier Izquierdo, tras esta formalidad legal de sacar a concurso un nuevo contrato, salvo que se apliquen otros criterios, no habrá otra cosa que la renovación de una relación contractual que desde hace años el Ayuntamiento mantiene con el mismo profesional, antes dentro de los servicios municipales y ahora desde fuera.

Así, este contrato viene precedido de otros dos similares, uno adjudicado el 31 de agosto de 2006 y otro del 27 de mayo de 2008, todos prorrogados. "Ante la imposibilidad de una nueva prórroga", según los socialistas, el Ayuntamiento lo saca de nuevo a concurso, "para que todo siga igual" en lo que supone "una larga coincidencia de intereses pagada con fondos públicos".

En este sentido, recuerda que el anterior adjudicatario de este contrato, Carlos Baró, que asesoraba al alcalde, propuso el desvío de la variante de Mercancías, "mientras asesoraba simultáneamente a los propietarios del suelo en el Área Homogénea 8, a los que afectaba el paso de la vía, de no desviarse la variante".

El portavoz socialista ha añadido que su Grupo nunca ha entendido la necesidad de formalizar este contrato, "toda vez que el Ayuntamiento cuenta con técnicos suficientes para asesorar al alcalde, más aún cuando se ha constituido dentro de la estructura orgánica de la corporación una Oficina para la Integración de la Red Arterial Ferroviaria".

Por otro lado, ha señalado, "el contrato no ha dejado de ser un arcano por su falta de transparencia". Como ejemplo, ha citado Izquierdo que, en noviembre de 2007, él mismo solicitó copias de los informes elaborados por el adjudicatario, así como copia de las actas de recepción de los trabajos. La respuesta fue que no había informes por escrito del trabajo realizado, sino sólo "verbales".

Izquierdo ha asegurado que el alcalde admite "va para largo", y que se desconocen los servicios concretos prestados en los últimos años en los que la Sociedad Valladolid Alta Velocidad no ha promovido nuevos proyectos, Izquierdo entiende que esas tareas "son perfectamente asumibles por la Oficina para la Integración de la Red Arterial Ferroviaria", y por ello apela de nuevo a la tan renombrada "austeridad, que se aplica sólo a lo que el alcalde considera".

Por último, Izquierdo ha recalcado que no cree que sea "de recibo" que "se mantengan o incrementen los contratos de consultorías y asesoramientos técnicos, cuando se reducen contratos de prestación de servicios educativos en un 20 %, como se ha aprobado para los nuevos contratos de Escuelas Infantiles Municipales".