El presidente de Banco Sabadell, Josep Oliu, ha dicho que la cifra de 62.000 millones fijada como máxima por dos consultoras independientes para destinar a la banca española ha de ser suficiente para "calmar" las opiniones de los mercados.

Según ha señalado Oliu, a preguntas de los periodistas después de participar en un acto institucional en Oviedo, ese cálculo "tira por arriba" y se pone en unas necesidades "hipotéticas" que son "muy poco probables". Es decir, esas cantidades corresponderían al peor comportamiento que se pudiera registrar. Tal y como lo definió Oliu, es una "hipótesis de estrés".

De esta forma, lo que se hace es fijar, en el caso de que la economía vaya por los derroteros "que no esperamos", la cantidad máxima para que los bancos tengan capacidad de capital suficiente. Por eso, Oliu se ha referido a la cifra como una "hipótesis conservadora" que debería ser "más que suficiente" para hacer frente a los escenarios realistas que tendrá que afrontar la banca.

De hecho, Oliu ha relacionado los últimos acontecimientos con la bajada de la prima de riesgo, una vez que se ha conocido la cantidad. No obstante, ha recordado que el sistema financiero y las cuentas públicas están "conectadas" y que este no es más que un elemento de un "paquete" de medidas que hay que adoptar, que incluye "ajustes fiscales, impulsos de crecimiento a nivel europeo y saneamiento y confianza de los bancos".

Tal y como ha dicho en la mañana de este viernes, Oliu ha dejado claro que el Banco Sabadell no va a recurrir a dinero público porque está en una buena situación y se ha recapitalizado en más de 3.000 millones.