El Plan Integral Nacional de Turismo (PNIT), aprobado este viernes por el Gobierno, contará con una aportación que oscilará durante los próximos cuatro años, incluido el presente ejercicio, entre 1.600 y 1.800 millones de euros, ha anunciado este viernes el ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria.

En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, ha precisado que se destinarán 438 millones del citado presupuesto en 2012, la misma cantidad que en 2013, mientras que en 2014 serán 460 millones y 480 millones en 2015.

La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha señalado que el turismo va a ser "una política de Estado", liderada desde el Gobierno con la colaboración de las administraciones y la público-privada para impulsar uno de los sectores clave para el crecimiento económico y de empleo.

La puesta en marcha del plan coincide con el año en el que el mundo va a conocer al turista 1.000 millones aproximadamente  en torno a septiembre u octubre, ha apuntado Soria.

Con el plan, el Gobierno se propone que el sector turístico se consolide y siga teniendo una posición de liderazgo mundial a lo largo de los próximos años, ya que "no podemos quedarnos impasibles y tenemos que hacer cosas para que el turismo siga siendo un motor de impulso y, sobre todo, uno de los sectores sobre los que se asiente la recuperación económica", ha resaltado.

Se trata del primer plan sectorial que ha aprobado el Gobierno y que ha sido elaborado por la Secretaría de Estado de Turismo, a través del Instituto de Turismo de España (Turespaña), con la aportación de las Comunidades Autónomas, por medio de la Mesa de Directores Generales y de la Conferencia Sectorial, el Consejo Español de Turismo y la Comisión Interministerial.

El PNIT, diseñado para el período 2012-2016, está compuesto por 6 ejes, 28 medidas y 104 acciones, cuya finalidad es impulsar la competitividad de las empresas y los destinos turísticos, renovar el liderazgo mundial en el sector y contribuir a la generación de riqueza, empleo y bienestar de los ciudadanos.

El Ministerio de Industria liderará la ejecución del plan en toda su vigencia y, para ello, las medidas están priorizadas y situadas en un cronograma de actuación, ha detallado Soria, según quien se podrán medir los indicadores y habrá comisiones periódicas de evaluación.

Los pilares fundamentales sobre los que se asienta el plan son la fuerza de la marca España, mediante su promoción coordinada; orientación al cliente, gestión encaminada a la fidelización de los mercados maduros, unidad de mercado, a través de la armonización de la legislación, y la colaboración público-privada.

En cuanto a la orientación al cliente, se desarrollará un plan de fidelización para los turistas, se agilizará la expedición de visados y se hará una campaña para estimular la demanda turística nacional.

En el eje de apoyo a ofertas y destinos, se respaldará la transformación integral de los destinos maduros y se ponen en marcha nuevas líneas de crédito, eliminando las anteriores limitaciones de inversiones financiables.

Se homogeneizará la clasificación de establecimientos hoteleros, rurales y cámping, y se buscará poner en valor del patrimonio nacional, cultural, natural y enogastronómico de España.

El plan prevé también incluir la perspectiva turística en la modificación de la Reforma Laboral, la Ley de Costas, Arrendamientos Urbanos o en la de Aguasciertas, así como la reorganización de las 33 Oficinas Españolas en el Extranjero.

En el pilar de conocimiento, se desarrollará un catálogo de servicios de Turespaña y se reorganizará las Consejerías de Turismo de España en el Exterior.

Para favorecer el talento y el emprendimiento, se crean unas líneas de crédito para jóvenes emprendedores en turismo por considerar que es el colectivo con mayor potencial para introducir la innovación al sector.