Un nuevo cómic de 'Star Wars' se cachondea de 'El ataque de los clones' (y sus diálogos)

Tras ver Star Wars: Episodio II - El ataque de los clones, allá por 2002, muchos nos alegramos de que Anakin Skywalker tuviera los ojazos de Hayden Christensen. ¿Por qué? Pues, porque si el joven Jedi hubiera dependido de sus palabras para seducir a Padmé Amidala (Natalie Portman), ni Luke Skywalker ni Leia Organa hubieran nacido nunca. Decir que los diálogos escritos por George Lucas para la joven pareja fueron acartonados e inverosímiles es quedarse corto, algo que reconocen la mayoría de los fans… y que ahora sirve para que un cómic de la saga (de los oficiales, ojo) nos cuente la verdadera historia de su amor.

Tag & Bink Episode I: Revenge of the Clone Menace es el tebeo humorístico sobre los dos estudiantes más ineptos de la Academia Jedi, y sobre cómo guiaron en las sombras a Anakin para que lo la fastidiase del todo con la reina de Naboo. Tras un par de tropezones bien gordos (¿sabías por qué Obi-Wan no podía encontrar la ruta a Kamino? porque estos dos prendas borraron los datos de navegación) y de morirse de vergüenza ajena comprobando la poca facilidad de palabra de Anakin (lo de "No me gusta la arena" sigue doliendo) ambos se ofrecen a echarle una mano al futuro Darth Vader soplándole palabras tiernas para ganar el corazón de su chica, al estilo de Cyrano de Bergerac. Incluyendo la sugerencia de que invite a la joven a una cena romántica.

Así pues, el público warsie puede saber por fin el motivo de que Anakin Skywalker hablara como un catorceañero con Amidala: porque sus diálogos habían sido escritos por dos catorceañeros. La argucia acaba funcionando… y también salva a los dos chavales de espicharla durante la Orden 66, ya que Darth Vader les perdona la vida (provisionalmente) en agradecimiento a su ayuda romántica. En el cómic, Tag y Bink acaban atrapados en Tatooine al final de la historia. En el mundo real… pues nos encantaría saber cómo se toma George Lucas esta forma de enmendarle la plana.