Rajoy ha comparecido este domingo para defender la petición realizada este sábado de ayuda a la banca española. "Si no hubiéramos hecho los deberes en estos cinco meses, lo que se hubiera planteado ayer —por este sábado— hubiera sido la intervención del Reino de España", ha aseverado el presidente del Gobierno.

"Y como llevamos cinco meses haciendo nuestros deberes, lo que se planteó ayer —por este sábado— fue la apertura de una línea de crédito para nuestro sistema financiero", ha continuado en la primera rueda de prensa —con preguntas— tras recibir este sábado numerosas críticas por su silencio en el mismo día en que se anunciaba el rescate a los bancos españoles.

Así, el jefe del ejecutivo ha calificado el préstamo de Bruselas como "línea de crédito" y no "rescate": "No voy a entrar en debates nominalistas", respondió Rajoy ante la pregunta de si la petición de ayuda de este sábado es un rescate o no—.

"Lo de ayer —así se ha referido en todo momento Rajoy al rescate bancario— forma parte de un plan global de saneamiento de la economía española", ha dicho, y ha matizado que "se enmarca en las medidas de reestructuración del sistema financiero español".

Gracias a ello, en palabras de Rajoy, este sábado "ganó la credibilidad del futuro de la zona euro y la solidez de la moneda común", así como la posibilidad de que pronto vuelva a fluir en España el crédito a familias y empresas.  "Lo ocurrido demuestra las ventajas de la cooperación en Europa", aseguró el presidente del Gobierno. "Yo creo que la decisión de ayer manda un mensaje nítido y claro: que el euro es un proyecto irreversible, es muy bueno para el euro, para Europa y para España", añadió.

Mariano Rajoy ha hecho mención al discurso realizado durante el debate de investidura el pasado mes de diciembre: "En esa comparecencia fijé con claridad los objetivos: crecimiento económico y creación de empleo. Siguen siendo los objetivos, como es natural", indicó el presidente.

Según ha indicado el presidente del Gobierno en rueda de prensa, el préstamo de hasta 100.000 millones de euros, inyectado a través del FROB, "no afectará al déficit público, y por tanto los planes del Gobierno no cambian".

Sin embargo, De Guindos indicó este sábado que la ayuda europea se contabilizaría como gasto a efectos de déficit. Rajoy tampoco ha aclarado cómo va a recaudar el dinero España para pagar a Bruselas los intereses de la deuda generada por esa ayuda millonaria.

Además, ha instado a esperar a los evaluadores independientes —las auditorías— para dar una cifra concreta de la ayuda: "El mensaje que se lanza a los mercados es mucho más claro, responde a una petición nuestra".

Relacionado con ello, ha descartado de manera clara que haya recibido algún tipo de presión externa o interna —no ha especificado— para recibir la ayuda. "A mí nadie me ha presionado, el que ha presionado he sido yo, porque yo quería una línea de crédito para resolver un problema importante (...) Esto se tenía que haber hecho hace tres años", ha dicho.

"¿Por qué no se ha hecho antes? Pues ya me gustaría a mí saberlo, porque hay otros países que hicieron esto hace tres años", ha zanjado el presidente del Gobierno.

"Me voy porque la selección española es la campeona del mundo y de Europa, porque es bueno que un presidente vaya a ver el partido inaugural y porque me ha invitado el presidente polaco", se ha justificado Rajoy. "A fin de cuentas, voy a hacer seis horas de vuelo, voy a estar allí dos horas y media y la selección lo merece", ha continuado diciendo el jefe del Ejecutivo.

"Creo sinceramente que debo ir", ha añadido el presidente del Gobierno, que ha matizado que si lo de este sábado no se hubiera resuelto, no hubiera ido al partido.

Rajoy no tiene previsto comparecer en el Parlamento para explicar el préstamo europeo para sanear la banca española hasta que no esté cerrado todo el mecanismo para poner en marcha la línea de crédito de 100.000 millones de euros pactada por el Eurogrupo, según informaron fuentes de Moncloa.

Dichas fuentes precisaron que esto no será antes de que se produzca el Consejo Europeo de jefes de Estado y de Gobierno prevista para los días 28 y 29 de junio, donde está previsto que se de el visto bueno a todo el procedimiento.