Ganar tres grandes campeonatos de forma consecutiva, llámense Eurocopa o Mundial. Ese es el reto que se ha marcado la selección española para la cita continental, que este viernes se pone en marcha en Ucrania y Polonia. Ninguna selección lo ha conseguido jamás.

Alemania es la única que estuvo a punto de lograr esa triple corona en los años 70, cuando su camiseta la vestían un tal Beckenbauer o el torpedo Müller. Aquel poderoso equipo teutón levantó la Eurocopa del 72, el Mundial del 74 y también se plantó en la final de la Euro del 76. Solo el famoso penalti de Panenka (flojo y por el centro) evitó el triplete germano y dio el título a la ya extinta Checoslovaquia en la muerte súbita (2-2, a la conclusión de la prórroga).

Ni siquiera al otro lado del Atlántico, donde la Copa América sería el equivalente a nuestra Eurocopa, han logrado la hazaña. Argentina fue campeona de Suramérica tres años consecutivos (1945, 46 y 47), pero no pudo enlazar esos títulos con un Mundial porque en la década de los 40 no se celebró ninguno debido a la Segunda Guerra Mundial.

Más allá de la triple corona, España también podría conquistar en Ucrania y Polonia la tercera Eurocopa de su historia y convertirse en la selección más laureada del continente junto a Alemania, la única tricampeona de Europa (1972, 1980 y 1996).

Francia, que reinó en el continente en 1984 y 2000, es la otra selección que aspira a liderar el palmarés del torneo. Curiosamente, España, Alemania y Francia son las favoritas en las casas de apuestas.

Vaya por delante que no será nada fácil. Michel Platini es el máximo goleador de la historia de la Eurocopa con nueve dianas y, curiosamente, todas las marcó en la misma edición de 1984.  Muy complicado igualar su récord.

Villa es el máximo artillero de la historia de España con 4 goles, que le sirvieron para ser el Pichichi en 2008.