El grupo de 24 militares españoles enviado a el Líbano para preparar la participación de un contingente español en la Fuerza Interina de las Naciones Unidas en el Líbano (FINUL) regresó esta tarde a España, tras reconocer la región en la que se desplegarán las tropas españolas.

La misión, que viajó a el Líbano el pasado miércoles, ha elaborado un informe que recoge detalles sobre la situación en el país y propone la estructura y capacidades de las fuerzas, así como la protección de la que deben disponer.

Los militares han estudiado también las ventajas e inconvenientes de los diferentes emplazamientos en los que probablemente se instalarán los cuarteles con mando español.

No obstante, todavía no se conocen los lugares exactos en los que se desplegará el contingente español, ya que la ONU aún tiene que asignar zonas a los distintos países.

Antes de regresar desde el Líbano, el coronel Javier Cabeza, jefe de planes del mando operativo, comentó que, aunque la situación en el sur "está en calma" y que "la actitud de la gente ha sido afable", es muy difícil evaluar la situación real sin acudir a otras fuentes.

Junto al grupo de militares españoles viajaron a el Líbano otros tres oficiales del Ejército que no regresarán a España de momento y que se integrarán en el plan operativo de la FINUL, en su base situada en la localidad meridional de Nakura.

El Gobierno español aprobó el viernes enviar hasta 1.100 soldados a el Líbano en una misión de la ONU , en la que España asumirá el mando de una brigada multinacional que se desplegará en el sur del país.

El despliegue en el sur de el Líbano se hará en dos fases: en la primera irá un batallón de la Brigada de Infantería de Marina, con sede en San Fernando (Cádiz), y el 1 de noviembre, una brigada multinacional, liderada por España, relevará a los infantes de Marina.

Un operación de riesgo

El general jefe de la Fuerza Terrestre del Ejército, Pedro Pitarch Bartolomé, reconoció hoy que el envío de un contingente militar al Líbano implica "riesgos", aunque consideró que en esta cuestión "se está haciendo todo como debe hacerse".

Tras despedir al grueso de los 269 efectivos que en los próximos días partirán hacia Bosnia Herzegovina en un relevo de tropas, rechazó entrar en "polémicas entre partidos" en torno al envío de soldados a territorio libanés y subrayó que el traslado de un contingente militar español al Líbano se produce a raíz de una resolución de Naciones Unidas, "que es la mayor fuente de derecho Internacional".

Por otro lado aseguró que las cuestiones relativas a las condiciones en las que operarán las tropas españolas "están en manos del Jefe del Estado Mayor de la Defensa", que es quien las está "planeando y estudiando".

"Esa información, supongo que es la que va a permitir al ministro de Defensa explicar el día 7 en el Congreso cuáles son exactamente los detalles", añadió, después de haber asegurado que "se está haciendo todo por los pasos como deben hacerse".