Los sindicatos de la Sanidad hacen piña con el Severo Ochoa

El conflicto del hospital Severo Ochoa se extiende desde ayer a las 11 áreas sanitarias de la comunidad, según proclamaron ayer los representantes sindicales de toda la región tras reunirse en Leganés con la junta de personal del centro.
Los sindicalistas atendieron en el salón de actos a una exposición de Isabel Serrano, presidenta de la junta de personal del hospital de Leganés, «sobre las denuncias anónimas contra profesionales médicos y han decidido apoyar a la plantilla en sus movilizaciones», aseguró.

Los trabajadores del Severo Ochoa reclaman la restitución en su puesto del anterior jefe de urgencias, el doctor Luis Montes. El médico fue relevado el 11 de marzo de su cargo por la Consejería de Sanidad tras la remisión a la Fiscalía de dos denuncias anónimas sobre la irregular administración de sedantes a pacientes terminales.

Como ejemplo de la solidaridad de los demás centros sanitarios, Serrano citó la iniciativa de los representantes del Ramón y Cajal, donde desde hoy se celebrarán concentraciones a las 12.00, como las que a diario protagonizan los trabajadores del Severo Ochoa.

Más respaldos

El de los sindicatos no fue el único respaldo que recibieron ayer los profesionales del hospital de Leganés. La Asociación para la Defensa de la Sanidad Pública exigió ayer la dimisión o destitución del consejero, Manuel Lamela, por «estar dañando gravemente la credibilidad y eficacia» del sistema madrileño. El alcalde de Fuenlabrada, Manuel Robles, aseguró ayer que cree que Lamela «se equivocó» y debería restituir a los médicos destituidos.

Por otra parte, la Junta de Personal informó de que ha recibido una nota de la comisión de mortalidad del hospital en la que «queda patente» que ese órgano «nunca ha señalado irregularidades en la sedación de pacientes» en las urgencias, tal y como afirmó Lamela el lunes.

Lamela insiste en que no dimitirá

El consejero de Sanidad, Manuel Lamela, que volvió ayer a confirmar rotundamente que no se plantea dimitir, cargó por escrito contra los portavoces del PSOE e IU en Madrid, Rafael Simancas y Fernando Marín, respectiva- mente. Lamela lamentó de ambos que «su actitud política no haya estado a la altura de las circunstancias» en la crisis del Severo Ochoa. La carta reprende a la oposición por actuar «anteponiendo intereses políticos a los de los ciudadanos y de los profesionales del sistema».

Mostrar comentarios

Códigos Descuento