La salida de la autopista AP-7 en Girona Sur y el peaje de Martorell han sido este domingo el escenario de las protestas de cientos de conductores que se han negado a pagar el peaje, convocados por la plataforma #novullpagar ("no quiero pagar").

Una caravana de centenares de vehículos colapsaba este domingo a mediodía durante una hora y media la salida de la autopista AP-7 en Girona Sur. La protesta comenzó a las 12.00 horas y se prolongó hasta las 13.30 h, provocando una larga cola en todo el ramal de la salida.

Los primeros vehículos en llegar al lugar donde ha tenido lugar la protesta han sido los de los partidos políticos que apoyan la campaña de boicot a los peajes, y que en las comarcas de Girona son la Candidatura d'Unitat Popular (CUP), Solidaritat Catalana per la Independència (SI), ICV-EUiA y ERC.

A partir de aquí, la movilización ha ido creciendo con manifestantes que a pie se han desplazado para dar apoyo a la plataforma y con los usuarios de la autopista que se han encontrado con la protesta y que también han decidido no pagar.

A la salida del peaje, un grupo de unas 50 personas han ocupado parte de la vía para gritar "no paguéis", "hoy no se paga" o "independencia" a los vehículos que se aproximaban hasta la zona de pago.

La conductora Ainoa Barahona ha declarado, a la salida del peaje, que no había pagado porque han sido fijados "unos precios abusivos" por unas infraestructuras que "ya están amortizadas".

"Las vías secundarias están en muy mal estado y no tenemos alternativa para viajar, con lo cual se nos obliga a pagar de forma indeterminada unas infraestructuras amortizadas", ha recalcado.

Medio centenar de vehículos, también seguidores de la plataforma ciudadana #No vull pagar, ha colapsado este domingo el peaje de Martorell. Los representantes de la plataforma llevaban "senyeres" y "estelades" y han coreado lemas como "España nos roba", "que pague Rajoy" o "No vull pagar".

A la salida de la barrera del peaje en sentido Barcelona el trabajador de una marca de bebidas catalana publicitaba los productos al tiempo que miembros de la plataforma repartían información sobre la campaña entre los conductores.

Antonio, un sevillano que estaba de vacaciones con su familia, ha mostrado su apoyo a la campaña porque, según ha afirmado, "desde Sevilla hasta aquí ya no sé ni el dinero que llevo gastado, es una vergüenza. Deberían acabar con todos los peajes de España, los catalanes, los vascos y los valencianos, con todos".

Marina viajaba de Tarragona a Barcelona con su marido y sus dos hijos, y ha confesado que "ya hace semanas que no pagamos los peajes y lo hago fundamentalmente por mis hijos, para que ellos no tengan que pagar los platos rotos de España", comentaba después de pasar la barrera sin pagar.

María Luisa volvía a Barcelona desde Vilafranca del Penedès y ha señalado que se sumaba a la campaña de boicot, aunque posteriormente le puedan multar, porque considera que "no podemos aguantar más esta situación".

Durante el tiempo que ha durado la protesta, una media hora, también se ha producido algún enfrentamiento aislado entre usuarios y miembros de la plataforma. "Yo estoy en contra de los peajes —ha dicho Alfonso, uno de estos usuarios— pero es lo que hay, que cambien las normas, pero hasta que esto no ocurra, las normas se deben cumplir".