El Eixo Atlántico reclama de la Cumbre Ibérica que se celebrará el próximo miércoles 9 de mayo en la ciudad lusa de Oporto "un compromiso" de los Gobiernos español y portugués con la modernización de la línea ferroviaria del Miño.

En un comunicado, su presidente, José Maria Cunha Costa, ha recordado que el subeje Vigo-Oporto representa "a una población de dos millones de habitantes", equivalente a la que tiene el área metropolitana de Lisboa. Por ello, exige "un nivel similar de inversiones" y, "como mínimo", disponer de una conexión ferroviaria de calidad.

La modernización de la línea del Miño, tras la "renuncia" de Portugal al AVE, pasa a ser uno de los objetivos estratégicos del Eixo Atlántico.

Y es que, según sus cálculos, esta modernización posibilitaría una conexión competitiva entre Oporto y Vigo, en torno a los 75 minutos, continuando hasta Lisboa en un tiempo estimado de cuatro horas.

Además, la convivencia de líneas semiderechas con líneas que se detendrán en las estaciones intermedias menores convertiría la línea "en la columna vertebral" de la movilidad estructural en el Miño.

Acto de reivindicación

En este sentido, varios miembros del Eixo Atlántico, con su presidente a la cabeza, han preparado un acto reivindicativo y una rueda de prensa para este lunes en la estación de ferrocarril de Viana do Castelo, con el fin de reclamar la modernización del tramo Nine-Valença.

En concreto, se pide la presentación conjunta por los Gobiernos luso y español de la petición de financiación comunitaria para los tramos Nine-Valença y Tui-Vigo, con cargo a los fondos europeos 2014-2020. Dicha petición debe ser enviada a Bruselas en junio y el Eixo espera que se apruebe en la Cumbre del miércoles.

Por último, demanda la "renegociación" con la empresa Mota Engil, adjudicataria del tramo cancelado, para que asuma la modernización de la línea del Miño, "con cargo a la indemnización que por ley les corresponde".