"El Estado español quiere que el proceso democrático en Euskal Herria se pudra"

  • La izquierda abertzale ha acusado al Gobierno de "empecinarse" en "políticas de excepción", dando la espalda al "diálogo".
  • Pernando Barrena, uno de sus dirigentes, ha criticado la "política de rodillo policial judicial" contra los abertzale.
  • El ministro de Interior ha instado a los indepentistas a que exijan a ETA su "disolución incondicional".
El dirigente de la izquierda abertzale Pernando Barrena.
El dirigente de la izquierda abertzale Pernando Barrena.
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El dirigente de la izquierda abertzale Pernando Barrena.

El dirigente de la izquierda abertzale Pernando Barrena ha acusado este sábado al "Estado español" de "querer dejar que el proceso democrático se pudra como agua estancada".

Barrena ha hecho estas declaraciones en una rueda de prensa en San Sebastián en la que ha comparecido junto a simpatizantes de la izquierda abertzale encausados en diferentes sumarios, entre ellos D3M/Askatasuna, Segura, 35/02 y Bateragune.

Pernando Barrena ha acusado además al "Estado español" de "empecinarse", "seguir enrocado en su inmovilismo" y profundizar en las "políticas de excepción, dando la espalda al instrumento fundamental para todo proceso resolutivo, el diálogo".

Ha advertido de que "se equivocan de nuevo" en su intención de dejar que el "proceso democrático se pudra como agua estancada" porque "el agua en movimiento no se estanca, ni se pudre" y "Euskal Herria está en marcha, hacia la solución".

Ha asegurado que el Gobierno inició durante el mandato de José María Aznar una "política de rodillo policial judicial" contra la izquierda abertzale que, en su opinión, ha seguido "rodando" con José Luis Rodríguez Zapatero y ahora con Mariano Rajoy.

"No ha cesado la correa de las detenciones, juicios, ilegalizaciones y castigos de excepción", ha comentado Barrena, quien ha afirmado que en total "en los diversos sumarios políticos contra la unidad popular" se ha castigado o imputado a "más de 100 personas", de las cuales 10 se encuentran encarceladas "por realizar un trabajo estrictamente político", ha dicho.

Ha criticado el sumario Bateragune, a su juicio, "totalmente político", el juicio oral que se iniciará contra las plataformas D3m y Askatasuna para "haber promovido una oferta electoral", el mantenimiento de "una política penitenciaria de excepción" para los presos de ETA y la reciente decisión del Tribunal Constitucional de avalar la aplicación de la "doctrina Parot".

Mensaje de Fernández Díaz a los abertzales

El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha demandado a la izquierda abertzale a exigir a ETA su "disolución incondicional" y a pedir perdón a las víctimas de la banda terrorista.

"Ahora que la izquierda abertzale está en las instituciones y que quiere aparecer como abanderada de la paz tiene que demostrar muchas cosas, entre ellas que pida y exija la disolución incondicional a ETA y pida perdón por los crímenes de ETA", ha afirmado en declaraciones a los periodistas tras presidir el acto de homenaje a los tres policías nacionales fallecidos en enero en la playa de Orzán, en A Coruña.

Fernández ha recordado que durante más de cuarenta años la izquierda abertzale ha estado "jaleando" y "aplaudiendo" los crímenes de ETA por los que ahora "debe pedir perdón". "La izquierda abertzale todavía no le ha exigido a ETA su disolución incondicional", ha subrayado.

Pese a que se cumplen seis meses del anuncio del cese definitivo de la violencia de ETA, el ministro de Interior ha asegurado que el Gobierno no va a "bajar la guardia" en la lucha contra el terrorismo "hasta que ETA no haya dejado de existir".

En esta línea, ha recordado que ETA anunció el cese de la violencia tras haber sido "derrotada" por el Estado de derecho. No obstante, Fernández ha insistido en que la noticia que todos los españoles están esperando es la disolución incondicional de la banda terrorista.

"Si de verdad ha dejado definitivamente de actuar, no tiene sentido que, aunque sea en la clandestinidad, siga existiendo", ha afirmado.

Por ello, ha concluido que, si ETA no toma la decisión de disolverse "por las buenas", el Estado democrático lo impondrá "por las malas", mediante la "actuación implacable" de policía y tribunales.

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