El Congreso de los Diputados ha aprobado este jueves la Ley de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera con el voto a favor de PP, CiU, UPyD, Foro y UPN —un apoyo menor (192 votos) que la reforma constitucional acometida por 'populares' y socialistas el pasado verano y que, con el apoyo de 316 diputados, dio lugar a esta normativa—, 116 votos en contra y cuatro abstenciones.

El PSOE ha votado en contra del proyecto que marca un déficit cero para todas las administraciones a partir de 2020, a pesar de las negociaciones mantenidas con el PP durante todo este jueves para evitar que el principal partido de la oposición rechace la medida que se aprobará esta jornada en el pleno del Congreso. Los socialistas defienden que el acuerdo era fijarlo en el 0,4%, pudiendo elevarse hasta el 1% en casos excepcionales.

La votación ha contado finalmente con 192 votos a favor, 116 en contra y cuatro abstenciones. El ministro de Hacienda Cristóbal Montoro ha agradecido finalmente el apoyo de los grupos nacionalistas que se han sumado a esta ley "y no estuvieron en la pasada Reforma de la Constitución".

"No hay país en Europa que tenga una ley así. Ahora hay que pedir que la ley se apruebe cuanto antes para que todas las Administraciones Públicas se tengan que adherir a ella", ha dicho Montoro sobre una norma que, tras su paso por el Senado, volverá a la Cámara Baja la última semana de abril, cuando obtendrá su aprobación definitiva. "Es el instrumento adecuado para que desaparezca el déficit público y para volver a ser un socio fiable en Europa".

Montoro, sin embargo, ha lamentado que el PSOE haya votado en contra de la ley. "Lamentamos que haya una pose política sobre el 0,4% o el 0%", ha afirmado el ministro, que asegura haber ofrecido diversas alternativas a la redacción original que no han sido aceptadas por el PSOE.

En declaraciones a los medios de comunicación antes de entrar al pleno extraordinario en el que se debate la ley, la portavoz del PSOE en el Congreso, Soraya Rodríguez, había señalado que la "exclusión del Gobierno les obligó a votar no". No obstante, añadió que el PSOE "está a favor de la estabilidad presupuestaria" y ha recordado que su partido fue el que propuso esta ley cuando gobernaba.

Según Rodríguez, el ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, ha hecho una propuesta de última hora que consistía en pedir el voto favorable del PSOE sin cambiar "ni una coma" del proyecto de ley que llega al pleno. "Montoro quería una instantánea para los telediarios", ha sentenciado Rodríguez.

El Gobierno no logró al apoyo del PSOE tras la reunión 'en el último minuto' mantenida por la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, y miembros del grupo socialista. El pleno del Congreso había realizado un receso precisamente minutos antes de que comenzara la votación del proyecto de Ley para que la cúpula del Ejecutivo negociara in extremis la abstención de los socialistas al texto.

Sáenz de Santamaría y el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, se reunieron con el diputado del PSOE Valeriano Gómez y la portavoz del PSOE en el Congreso, Soraya Rodríguez, para evitar que el principal partido de la oposición votase en contra de dicho proyecto. Pero tras más de veinte minutos de reunión el acuerdo no ha sido posible.

"Trabajamos por ese acuerdo, y confío en el sentido de la responsabilidad de todos y que ya han demostrado muchos grupos", dijo la vicepresidenta. No obstante, ha señalado que el Gobierno se mueve dentro del "marco del Tratado europeo", por lo que no ha avanzado si habría posibilidad de modificar el techo de déficit del 0% del PIB al 0,4 %, tal como piden los socialistas, para todas las administraciones públicas a partir del 2020.

El portavoz del grupo popular, Alfonso Alonso, ya había asegurado que el PP negociaría "hasta el último minuto" con los socialistas y apelaría a la "responsabilidad" del PSOE a fin de que "no se quede solo en su negativa".

Soraya Rodríguez también había declarado que los socialistas estaban abiertos a negociar "hasta el último momento" además de asegurar que su teléfono no había "sonado" tras la última reunión con el PP, de hace dos semanas, en la cual el PSOE exigió al Gobierno cumplir el acuerdo en favor de la estabilidad del pasado verano.

Poco después ambos mantuvieron una breve conversación en una de las salas contiguas al pasillo principal de la Cámara Baja, que luego tuvo su continuidad en un encuentro al que se sumaron el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, y el portavoz económico del PSOE, Valeriano Gómez.

Durante el debate del proyecto de ley en el pleno del Congreso, el portavoz de CiU, Josep Sánchez Llibre, ha argumentado su voto a favor por el acuerdo alcanzado con el PP para flexibilizar el criterio para reducir el endeudamiento de las comunidades autónomas con el fin de que pase de ocho a veinte años.

Ha resaltado que esta medida hará que en épocas de crecimiento puedan destinarse recursos financieros a la inversión, a estimular el crecimiento económico y a generar empleo. Sánchez Llibre ha elogiado el pacto con el PP, ha recordado la ley que plantea el gobierno catalán y ha insistido en que a CiU "no se le caen los anillos" al votar a favor ya que se trata de un acuerdo muy beneficioso para Cataluña.

También UPyD y UPN han defendido el proyecto de Ley y mientras el diputado de UPyD Álvaro Anchuelo ha valorado que la ley imponga más controles sobre las cuentas autonómicas, Carlos Salvador, de UPN, ha mostrado su apoyo a una mayor rigurosidad de las cuentas públicas.

No obstante, el PNV se abstuvo en la votación y el diputado Pedro Azpiazu ha insistido en la importancia de recoger la especificidad de los conciertos económicos de Navarra y el País Vasco en la norma. También ha criticado al Gobierno por tratar de hacer retroceder el "autogobierno" al no haber recogido este matiz en el texto que llegó al Congreso cuando sí estaba incluido en su anteproyecto.

Desde la izquierda Plural, el diputado de IU Alberto Garzón ha destacado que el proyecto de ley no dará confianza a los inversores, porque los mercados son "insaciables", al tiempo que ha añadido que los recortes sólo conseguirán empeorar la actividad económica, lo que reducirá los ingresos públicos y volverá a aumentar el déficit.