La Unidad Canina de la Policía Local de Alicante ha cubierto con sus patrullas las inmediaciones de la red completa de centros educativos de la ciudad —públicos, concertados y privados— y en todos ha detectado droga.

Tras un año y medio de actividad, esta media docena de agentes especiales acompañados por sus perros adiestrados han levantado 800 actas, la mayoría a menores de edad que la llevaban encima, aunque también han detenido a tres traficantes.

Según el oficial responsable, Sergio Melgares, también han erradicado el consumo —que en un 90% de casos es de derivados del cannabis, aunque también han encontrado coca y barbitúricos— en varios parques donde se reu-nían adolescentes que no iban a clase.

Los barrios donde más incidencia han detectado son los de Zona Norte, Pla-Carolinas, Cabo de la Huerta, Gran Vía y Ciudad de Asís. En algunos centros escolares se ha pedido a la Unidad Canina que realizara una inspección al sospechar del consumo de estupefacientes.

La edad de iniciación suele ser 13-14 años e influye mucho el grupo social, el entorno del adolescente, puesto que el problema surge porque el individuo, a tenor de la experiencia de estos agentes, quiere "integrarse" y "sentirse aceptado", según explicó ayer Melgares.

La alcaldesa, Sonia Castedo, destacó que esta labor preventiva ha dado pie a otras operaciones policiales de envergadura contra el tráfico de drogas. Ayer empezó en Alicante un curso nacional para 37 de estos policías.