La huelga general convocada por los sindicatos contra la reforma laboral, la octava de la democracia y la sexta de veinticuatro horas, arrancó formalmente a medianoche con el despliegue de piquetes en puntos clave.

En las horas previas, los dirigentes sindicales auguraron que la huelga sería un éxito, mientras que el Gobierno recalcó que no cambiaría sus planes.

Por su parte, el Gobierno informó de que la jornada transcurrió con "normalidad" en las primeras horas de la huelga general convocada por los sindicatos.

La huelga general convocada contra la reforma laboral es la octava que se ha convocado en España durante la etapa democrática.

De las siete anteriores, cinco fueron de veinticuatro horas (en 1985, 1988, 1994, 2002 y 2010), una de media jornada laboral (en 1992) y otra de una hora (1978).

MERCADOS: En Madrid, agentes de la Policía Nacional intervinieron para facilitar la entrada de una veintena de camiones en las instalaciones de Mercamadrid, ya que los piquetes se habían concentrado en las puertas, según explicaron fuentes de la Asociación de Empresarios Mayoristas del Mercado de Frutas de Madrid (Asomafrut). Los piquetes también han bloqueado el acceso a Mercavalencia y, según sindicatos, la actividad en Mercabarna se ha paralizado.

TRANSPORTES: También en la capital, los autobuses de las líneas nocturnas, los llamados "búhos", salieron de sus cocheras con normalidad y sin incidentes, según fuentes de la Empresa Municipal de Transportes (EMT).

Por la mañana se registraron incidentes entre unos 250 manifestantes y la Policía, como ha podido comprobar 20minutos.es, aunque la presencia policial ha garantizado el cumplimiento de los servicios mínimos.

Los trenes de cercanías y el metro están registrando retrasos.

Los servicios mínimos pactados entre el Ayuntamiento y el Comité de Huelga establecen el 30 % de los autobuses y del 20 % del servicio de Metro.

Los servicios mínimos pactados entre el Ministerio de Fomento y los sindicatos contemplan que durante la jornada de huelga habrá un 10 % de vuelos peninsulares, un 50 % de los trayectos entre la Península y Baleares, y entre un 20 % y un 40 % de los internacionales. Operarán al menos 1.240 vuelos, frente a los 4.500 que lo hacen en un día normal.

En cuanto al transporte ferroviario, circularán el 20 % de los trenes de alta velocidad, entre el 30 % y el 35 % de los cercanías. No circularán trenes de larga y media distancia, lo que supondrá la cancelación de unos 600 convoyes. En el caso de los trenes de vía estrecha, FEVE, la circulación oscilará entre un 25 % y un 40 %.

SERVICIOS: CC OO asegura que la recogida de basuras se paralizó en las grandes ciudades; los trabajadores secundaron "masivamente" la huelga general en las 75 ciudades más grandes de España.

Según CC OO, aunque los sindicatos cumplieron los servicios mínimos pactados, el inicio de la huelga en el turno de noche tuvo "paralizado completamente el servicio".

En las estaciones de servicio, la afluencia de vehículos durante la jornada del miércoles no fue muy diferente a la que se registra en días normales, según la Confederación Española de Empresarios de Estaciones de Servicio (CEEES).

El sector, que tiene un 20 % de servicios mínimos para esta jornada, no secundó masivamente este tipo de paros en otras ocasiones.

En el sector de prensa diaria, en el que la huelga estaba convocada para el miércoles, el seguimiento fue desigual, de acuerdo con los datos suministrados por las empresas. Por el contrario, los sindicatos aseguran que la participación fue "alta".

INDUSTRIA: En el sector industrial, los trabajadores del turno de noche de la planta automovilística de Volkswagen de Landaben (Pamplona), que emplea a más de 4.500 personas, secundaron la huelga, según el Comité de Empresa.

Los sindicatos aseguraron que el paro fue total en las grandes industrias de metal.

CONSTRUCCIÓN: La Federación de Construcción, Madera y Afines de CC OO (FECOMA-CCOO) y Metal Construcción y Afines de UGT (MCA-UGT) sostuvieron que el paro también fue total en las principales obras de infraestructuras y en las industrias de materiales de construcción.

Según un comunicado conjunto, "prácticamente todos los trabajadores" del turno de noche de estos sectores secundaron la huelga general convocada por los sindicatos contra la reforma laboral.

Según el secretario general de MCA-UGT, Manuel Fernández "Lito", fue el presagio de un éxito total de la huelga general en el sector de la construcción", recoge el comunicado.

La demanda de energía eléctrica se situaba a la una de la madrugada de en 22.829 megavatios, un 15 % por debajo de la registrada a la misma hora del jueves de la semana pasada (26.852 megavatios), según datos de la página web de Red Eléctrica de España (REE).

Sin embargo, esta caída no responde únicamente al descenso de actividad por el seguimiento de la huelga general convocada contra la reforma laboral, puesto que el consumo de electricidad ya era inferior durante la noche del miércoles, antes de que se iniciara formalmente el paro.

A las 23 horas, la demanda se situaba en 27.738 megavatios, un 16 por ciento menos que a la misma hora del miércoles de la semana pasada (32.980 megavatios).

Lo mismo ocurría a las 21 horas, momento en el que el consumo eléctrico alcanzaba los 32.685 megavatios, frente a los 37.396 megavatios de una semana antes, lo que suponía un descenso del 13 por ciento.

Tres horas y media antes de iniciarse oficialmente la huelga, los secretarios generales de CCOO y UGT, Ignacio Fernández Toxo y Cándido Méndez, respectivamente, se han reunido en la Puerta del Sol de Madrid con los piquetes informativos.

Toxo ha asegurado que la huelga será un éxito de los ciudadanos y obreros y ha puesto como ejemplo el seguimiento en los periódicos. En el mismo acto, Méndez ha ironizado sobre el "estrés" del Gobierno por el paro general y ha pedido a las Cortes Generales que no menosprecien el derecho constitucional a la huelga.

Desde el Gobierno, el ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, ha insistido en que el Ejecutivo no va a modificar "un ápice" su postura ante la reforma laboral.

En la misma línea, el ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, ha asegurado que el Gobierno "no va a ceder" ante la huelga general porque supondría "profundizar" una crisis que ya ha destruido muchos empleos.