Los cuatro incendios que azotan el Pirineo de Lleida desde el mediodía de este jueves han calcinado ya cerca de 430 hectáreas de vegetación forestal, según han informado los Bomberos de la Generalitat en un comunicado.

Una cincuentena de dotaciones terrestres tratan de extinguir el principal incendio, que afecta el Baix Pallars y que ya ha quemado cerca de 300 hectáreas de vegetación forestal.

El incendio —por el que se ha cortado la carretera N-260 a su paso por Sort— ha obligado a desalojar vecinos de Bresca, Useu y Báen, algunos de los cuales han sido acompañados a Peramea, y otros se han dirigido a casas de familiares.

El segundo fuego, en la montaña de Calbinyà entre Arcavell y Llirt, afecta ya a 90 hectáreas de vegetación forestal, y siguen en la zona 19 dotaciones terrestres entre los Bomberos de la Generalitat y del Principat de Andorra.

Este incendio ha obligado a desalojar dos masías de la zona con seis personas en cada una, aunque no se han producido heridos.

Otras 17 dotaciones terrestres de los bomberos tratan de apagar el fuego de Coll de Nargó en Montanissell, que sigue activo y ha quemado ya unas 30 hectáreas.

El incendio en el Pont de Suert que afecta el fondo de Viu de Llevata habría calcinado entre 8 y 10 hectáreas, y diez dotaciones de los Bomberos de la Generalitat se encuentran en la zona.

Las fuertes ráfagas de viento que soplan en el Pirineo de Lleida está "complicando mucho" los trabajos de extinción de los cuatro incendios forestales que arden en la zona, puesto que impide que puedan trabajar las dotaciones aéreas.

La Dirección General de Protección Civil ha puesto en alerta el plan especial de emergencias Infocat a consecuencia de la simultaneidad de diferentes fuegos forestales la mañana de este jueves, sobre todo en el Alt Pirineu.