Por qué 'Ojo de Halcón' podría ser la mejor serie de Marvel

Ya se rumoreaba, y muchos rezábamos porque fuese cierto. Pero ahora, tras la Comic-Con 2019, podemos asegurarlo: Ojo de Halcón tiene todos los números para ser la mejor serie de la historia de Marvel.

Y nos ha bastado con un logotipo para saberlo. Este, concretamente:

¿Por qué nos vinimos tan arriba cuando esta imagen apareció en el panel de la Casa de las Ideas? Pues porque es el mismo que empleó cierta colección de cómics protagonizada por el personaje de Jeremy Renner entre 2012 y 2015. Sus autores fueron el guionista estadounidense Matt Fraction y el dibujante español (salmantino, para más señas) David Aja, y hoy en día se la considera como lo más cercano a un clásico absoluto (a la altura de los de Lee, Kirby, Ditko y compañía) que ha publicado la Marvel de hoy.

Así pues, si el estudio adapta esta obra cumbre a la TV, puede tener entre manos uno de sus mayores triunfos… siempre que sepa hacerle justicia.

¿Justifican las virtudes del tebeo tanto bombo y tanto boato? Pues la verdad es que sí. Para empezar, tenemos una parte gráfica a la que el adjetivo "rompedora" le pega como un guante. Ignorando la actual tendencia del cómic de superhéroes al colorinchi y al brilli brilli digital, David Aja (asistido o relevado por otros artistas como Javier Pulido y Annie Wu) recurrió a los trucos clásicos del género y aliñó el resultado con unas gotas, o más bien unos chorros, de vanguardia estilosa.

El resultado, si bien deudor de maestros como Mazzuchelli, Alex Toth o, claro, Jack Kirby, es una delicia para los ojos, tanto por sus innovaciones formales como por su sentido del humor. Y, si dudas sobre esto último, observa la viñeta de arriba.

En cuanto al guion de Matt Fraction, su mayor virtud no fue solo su destreza al plantear aventuras enloquecidas. Lo que enamoró a los fans de Marvel (e intrigó a los no fans) fue su forma de asumir una realidad evidente: Clint Barton es un cutre.

En 2012, cuando esta colección vio la luz, Ojo de Halcón llevaba a cuestas muchos comentarios despectivos por parte del público de Los Vengadores (preguntándose qué pintaba un tío con un arco entre los héroes más poderosos de la Tierra). Y también con décadas de choteo por parte de los lectores de los cómics (y de los dibujantes, y de los guionistas, y…). La respuesta de Matt Fraction fue realzar en sus guiones esta cualidad de héroe de andar por casa, realzando la humanidad del héroe y dándole a sus aventuras una  disfrutable cualidad de tragicomedia.

De esta manera, mientras Clint tiene que llamar a Tony Stark para que le ayude a conectar su reproductor de dvd, conversa con Spider-Man y Lobezno sobre el último capítulo de Perros polis o recibe la visita de cuatro exnovias en el mismo día (una de ellas, en los cómics, Viuda Negra), alguien tiene que dejar alto el pabellón del heroísmo. Y esta tarea recae en el as en la manga de Ojo de Halcón. La cual es… Ojo de Halcón. Es decir, la gran Kate Bishop.

Cuando Fraction recurrió a ella para esta colección, Kate llevaba ya siete años dando tumbos por las historias de Marvel. Pero en 2012 era el momento justo para que una superheroína millennial y sin más aspiraciones que vivir aventuras (poniéndose fina a cócteles en el proceso) tuviera el rol protagonista en una serie. Mientras Clint se bandea con sus vecinos, su perro y sus ex, es Kate la que protagoniza historias de alta intriga internacional… hasta que se pilla las manos y su mentor debe acudir en su ayuda.

Así pues, aunque Vengadores: Endgame nos hubiera hecho concebir esperanzas acerca de Lila Barton yéndose a combatir el crimen con su papá, el anuncio de que Kate estaría en la serie de Ojo de Halcón hizo temblar los cimientos del Hall H.

Por supuesto, este dechado de virtudes no garantiza que Ojo de Halcón (el show televisivo) vaya a ser una obra maestra sin parangón. Si algo nos enseña la historia es que ni el cómic más prodigioso está a salvo de las manos de los ejecutivos. Y de las de Kevin Feige, menos aún. Aun así, Marvel y Disney + tienen entre manos una materia prima inigualable para hacer que Renner (y la actriz que dé vida a Kate) se luzcan de lo lindo. Esperemos que la aprovechen…