Una mujer deberá pagar 1.800 euros de multa por interrumpir un embarazo de seis meses

  • La debe pagar después de abortar en un estado avanzado de la gestación.
  • La acusada ingirió fármacos consciente de que le provocarían la pérdida del feto.
  • Abandonó al bebé aún con vida en un inodoro aunque falleció poco después.
Una mujer muestra la figura de plástico de un feto humano.
Una mujer muestra la figura de plástico de un feto humano.
GTRES
Una mujer muestra la figura de plástico de un feto humano.

Una mujer que se indujo ella misma el aborto mediante la ingestión de unos fármacos, cuando se encontraba en el sexto mes de gestación, ha sido condenada a pagar una multa de 1.800 euros.

Los hechos sucedieron el 3 de septiembre de 2009. La mujer, de nacionalidad brasileña, habiendo superado las 26 semanas de gestación, se tomó al menos diez pastillas, según la sentencia, "con ánimo de provocar la expulsión del feto" y de esa manera, darle "fin" a "su proceso vital" sabiendo que provocaría "tal efecto". Sin embargo, el pequeño no sufrió "anomalías ni alteraciones incompatibles con la vida".

La acusada, que en el momento de los hechos tenía 27 años, acudió al servicio de urgencias del Hospital Donostia y arrojó el feto en un inodoro del centro médico, de donde después "fue rescatado aún con vida por profesionales sanitarios". No obstante, tan solo un cuarto de hora más tarde, falleció a causa de una "anoxia tisular" (falta de aporte de oxígeno a los tejidos) y sobre todo debido al "parto inmaduro".

El juez la declara culpable

La resolución judicial considera "plenamente acreditados" los hechos por las pruebas practicadas durante el juicio. En él, profesionales de la medicina declararon que cuando la atendieron, la mujer les confesó haber tomado las píldoras. Además, un ertzaina aseguró que la acusada manifestó haberlo hecho con intención de abortar.

En la sentencia, también figura que la presunción de inocencia de la procesada se hubiera mantenido si únicamente hubiese tomado un comprimido para tratarse un dolor de estómago, como narró en el juicio; pero en el caso que nos atañe "sabiendo que estaba embarazada", ingirió una dosis de fármaco tan elevada como para provocarse un efecto abortivo, por lo cual pierde todo indicio accidental.

Por todo y en especial por ese motivo, el fallo considera que los hechos son constitutivos de un delito de aborto y por ello impone una multa de 1.800 euros.

Se da la circunstancia de que hace un año la procesada no compareció al juicio, por lo que obligó a suspender la vista a petición de la fiscal, y el juez del caso dictó una requisitoria contra la procesada para que pudiera ser juzgada.

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