El Grupo del PSOE en la Asamblea de Extremadura va a presentar una propuesta en el Parlamento extremeño para instar al Gobierno regional a que mantenga la ayuda a los doce ayuntamientos que gestionan en sus localidades centros de educación infantil de titularidad de la Junta, ya que "peligra" el futuro de estos centros que acogen a unos 600 niños de 0 a 3 años.

El diputado regional y portavoz socialista en la Comisión de Educación y Cultura de la Asamblea de Extremadura, Luciano Fernández, y el alcalde de Casar de Cáceres, Florencio Rincón, han explicado este miércoles en rueda de prensa que en la región existen, para el primer ciclo de Educación Infantil, 40 centros de titularidad y gestión de la Junta, unos 179 de titularidad y gestión municipal, y 12 centros que siendo titular el Gobierno regional son gestionados por los ayuntamientos a través de un convenio que se estipuló con el anterior gobierno socialista.

De hecho, esta docena de localidades, tres en la provincia de Cáceres y nueve en la de Badajoz, recibieron en 2011 un total de 927.000 euros para mantener el funcionamiento de estos centros pero "a fecha de hoy no se sabe nada de esos convenios y no hay ni un sólo euros consignado en los presupuestos regionales", subraya Fernández.

Según el diputado socialista de no mantenerse esta ayuda "se pondrá en peligro uno de los objetivos de la nueva Ley de Educación de Extremadura que es la equidad educativa" y además "se discriminaría a las zonas rurales" ya que los padres "no podrían conciliar la vida laboral y familiar".

"La Junta no tiene proyecto para esa etapa educativa y nos tememos que los recortes que se están produciendo en el sistema educativo también van a afectar a la etapa de cero a tres años", apunta Fernández que añade que desde el Gobierno regional "no hay voluntad para solucionar esto".

Compromiso del anterior gobierno

Por su parte, el alcalde de Casar de Cáceres, Florencio Rincón, ha explicado que en su municipio se puso en marcha en 1997 un centro de educación infantil con el compromiso del Gobierno regional de entonces de que la gestión se haría desde el consistorio pero con ayuda de las arcas autonómicas.

Según los datos aportados por Rincón, el centro de su localidad, que acoge actualmente a unos 66 niños, tiene un coste de funcionamiento de 205.000 euros, de los que los padres aportan a través de sus cuotas unos 48.000, por lo que el ayuntamiento tendría que asumir los 157.000 euros restantes, una cifra que "no puede asumir".

Por todo ello solicitan a la Junta de Extremadura que firme esos convenios para que esta docena de municipios pueda seguir prestando el servicio de educación infantil a niños de 0 a 3 años. "No pueden dejarnos ahora colgados", espeta el alcalde casareño que añade que si el centro fuera gestionado por la Junta le "saldría más caro que siendo gestionado por los ayuntamientos".

"En pueblos pequeños no existen otros centros, ni privados ni públicos, para llevar a los niños de estas edades, así que si no prestamos los ayuntamientos ese servicio, no lo habrá", concluye Rincón.