El empresario José Gregorio Bernabé ha declarado este lunes, en calidad de imputado por la pieza separada del caso Brugal relativa al Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Alicante, que él "no era un hombre de Ortiz" ya que tenía "su propia empresa", al tiempo que ha rechazado declarar sobre las conversaciones telefónicas hasta que no se clarificara "su legalidad".

Esta citación se ha producido a petición del propio empresario, que hace unos meses fue requerido por el juzgado pero en esa ocasión se acogió a su derecho de no declarar. José Gregorio Bernabé ha declarado menos de media hora ante el juzgado de instrucción número 5, que investiga la causa.

Según ha explicado a los medios de comunicación el abogado del constructor Enrique Ortiz, Francisco Ruiz Marcos, en su declaración, José Gregorio Bernabé ha negado que sea "un hombre de Ortiz" y ha resaltado que tiene "su propia empresa desde enero de 2007".

En este sentido, el letrado ha precisado que fue "contratado por 'Dreamview' en enero de 2009, cuando el proyecto de plan general era público y que fue contratado para tareas de asesoramiento contable, mercantil, cuentas de la sociedad".

Respecto a las conversaciones telefónicas, según Ruiz Marcos, Bernabé "ha dicho que no quería declarar hasta que no se clarificara la legalidad de las conversaciones".

Con anterioridad

Por su parte, el abogado de EU, formación personada en la causa como acusación popular, José Luis Romero, ha indicado que Bernabé "habla con Ortiz con anterioridad" a que el plan saliera a exposición pública, aunque sobre eso "se ha negado a contestar, con lo cual nadie sabe muy bien" por qué ha pedido declarar porque "él ya se negó a contestar en su momento".

"Simplemente ha hablado de cuando él entra en Dreamview como secretario y que él era titular de una mercantil que se llama Asesorama, que se formó para desarrollar los terrenos de Aguamarga —la conocida como Ciudad de la Economía—" y ha dicho que eso "era conocido, que cuando sale a exposición pública el plan general ya sale con la calificación que sale, que después se modifica esa calificación, pero que todo eso es público".

Así, según Romero, "cuando el juez le ha preguntado por conversaciones con el señor Ortiz anteriores a la exposición pública, ha dicho que no quería contestar". El abogado de EU ha resaltado que las conversaciones con Ortiz se produjeron "antes de que fueran públicas las determinaciones del planeamiento".

Este miércoles, el juez tomará declaración en calidad de testigos a otras tres personas, dos trabajadoras de Salvetti Abogados y G&M Gestión de Suelo, y un empleado del constructor Enrique Ortiz, Luis Miguel Sirvent, cuyo testimonio fue suspendido el pasado 16 de enero por falta de tiempo.