Vecinos de L'Hospitalet llevan 100 días ocupando un ambulatorio en protesta por su cierre

  • Los encerrados reclaman su reapertura a la Generalitat de Cataluña.
  • Los ocupantes son 'yayoflautas' o personas mayores del barrio.
  • Decidieron invadir el centro en el último día de funcionamiento.
  • Desde entonces, se organizan en turnos para no abandonar el edificio.
El CAP Rambla Marina del barrio de Bellvitge de L'Hospitalet (Barcelona).
El CAP Rambla Marina del barrio de Bellvitge de L'Hospitalet (Barcelona).
Bertran Cazorla / ACN
El CAP Rambla Marina del barrio de Bellvitge de L'Hospitalet (Barcelona).

Los vecinos del barrio de Bellvitge de L'Hospitalet de Llobregat cumplen este sábado 4 de febrero 100 días ocupando el Centro de Asistencia Primaria (CAP) de la Rambla de la Marina para reclamar a la Generalitat de Cataluña su reapertura.

Los ocupantes del ambulatorio son, en su mayoría, personas mayores del barrio -los autodenominados yayoflautas- que el pasado 28 de octubre decidieron invadir el centro en el último día de funcionamiento y, desde entonces, se organizan en turnos para no abandonar el edificio.

Francisco Polonio, miembro de la comisión vecinal, explica que no dejarán el encierro "hasta que vuelvan los médicos de cabecera y los especialistas" ya que el barrio, con unos 30.000 habitantes, se ha quedado con un solo ambulatorio, lo que consideran insuficiente. Los vecinos organizan a lo largo de la semana manifestaciones y diferentes actividades como charlas sobre la situación de la sanidad y han recibido el apoyo de personalidades como el cantante Dani Flaco.

"Todo esto lo llevamos los vecinos del barrio, los que siempre hemos luchado", relata Polonio. "Hace 40 años yo ya luché contra las inundaciones y luego por el apeadero del tren, por el ambulatorio, por el centro de día siempre ha habido motivos de lucha y ahora que el barrio estaba a un nivel bastante aceptable, ha llegado esto", lamenta.

A finales de enero, el Instituto Catalán de la Salud (ICS) inició conversaciones con los vecinos de Bellvitge para negociar una solución al encierro y hasta el momento se ha acordado abrir en la primera planta del ambulatorio los servicios de audiometría y de optometría, ya previstos inicialmente.

Sin embargo, los protagonistas de la ocupación continúan pidiendo la recuperación de los servicios de atención primaria, que se trasladaron al CAP Bellvitge, y del resto de servicios especializados, trasladados al CAP Just Oliveras y a consultas externas del Hospital de Bellvitge.

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