La consellera de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente, Isabel Bonig, ha señalado que los ajustes realizados en Ferrocarriles de la Generalitat Valenciana (FGV), que entran este martes en vigor, responden, al igual que en otros medios de transporte y otros ferrocarriles de otras zonas de España, "a la demanda y a las necesidades".

Bonig ha realizado estas declaraciones tras inaugurar la remodelación de la plaza Santa Clara de Castellón, junto al alcalde de la capital de La Plana, Alfonso Bateller, y tras ser preguntada al respecto.

"Lo que se ha hecho es un ahorro de 4 millones de euros mediante la reestructuración de los horarios y, sobre todo, la eliminación de aquellos trenes que tenía menos demanda, en primeras y últimas horas, porque todo esto está comprobado estadísticamente", ha añadido.

Sin embargo, ha dicho, "se han incrementado las frecuencias en las líneas donde se veía que eran más necesarias como las que van hacia el aeropuerto de Manises, sobre todo en fin de semana". "Lo que se trata es de hacer un transporte mucho más eficiente y económicamente sostenible, con unos ajustes que afectarán a menos de 50.000 pasajeros de los 71 millones de usuarios que usan Metrovalencia o FGV durante un año", ha aclarado.

Asimismo, ha apuntado que se están mejorando otros servicios de FGV como los contratos de suministro de limpieza o vigilancia, "en los que se ha conseguido ahorrar 6 millones de euros".

Preguntada por si estos ajustes son una medida temporal, Bonig ha respondido que "simplemente se han adoptado las medidas en base a la oferta y a la demanda que había, y si sube la demanda se volverá a reestructurar, y si no es así, habrá que ser más eficaces y más eficientes".