El consejo de ministros alemán que preside la canciller federal, Angela Merkel, acordó el miércoles la creación de un banco central de datos sobre neonazis que concentre las informaciones de todas las instituciones y organismos responsables de perseguir sus crímenes y delitos.

El archivo central acumulará los datos de "aquellos extremistas de derechas de tendencia violenta", también de quienes les respalden o quienes induzcan a la violencia neonazi, señalaron fuentes gubernamentales germanas.

Con este archivo se pretende facilitar la cooperación de las distintas policías y los responsables a nivel nacional y regional del Órgano para la Defensa de la Constitución, en el que se integran el contraespionaje y la lucha antiterrorista.

La creación del banco de datos es consecuencia del descubrimiento a finales del pasado año de una célula neonazi que había operado en la clandestinidad desde finales de los 90 en Alemania y asesinado a nueve ciudadanos extranjeros y una policía, además de cometer otros crímenes.

La célula terrorista de la autocalificada Clandestinidad Nacional Socialista (NSU) fue el pasado noviembre descubierta tras el suicidio de dos de sus integrantes después de un frustrado atraco bancario.

La muerte de los dos terroristas neonazis condujo a la detención de una tercera, miembro de la célula y varios colaboradores.

Este hecho evidenció que la falta de coordinación e intercambio de información entre los responsables de la lucha antiterrorista había permitido la actuación impune del comando durante mas de una década.