Alrededor de 1.500 personas se han manifestado esta tarde en Palma, convocados por la Plataforma 31D, formada por diferentes entidades sociales y políticas independentistas y nacionalistas, con el fin de reivindicar la "auténtica Diada de Mallorca".

Así, la marcha, que se ha celebrado sin incidentes, a diferencia del pasado año, cuando se detuvieron a cuatro personas, ha recorrido las principales calles del centro de la capital balear, bajo el lema 'Somos una nación, autodeterminación' y ha concluido en la plaza de los patines.

Los participantes han comenzado la protesta en el paseo del Borne, desde donde ha salido la marcha tras la pancarta inicial que llevaba inscrito el lema de la manifestación. Así, han pasado por la calle Unión, subido la cuesta de la Pols, donde los Maulets han leído su propio manifiesto delante de una fila de efectivos de la Policía Nacional.

A continuación, los manifestantes han continuado la marcha por la calle Sant Miquel y la calle Olmos para llegar finalmente a la conocida como plaza de los Patines, donde un representante del Colectivo Albaïna ha leído el manifiesto de la Plataforma 31D titulado 'Pels nostres drets socials i nacionals, a Mallorca en català'.

La marcha ha discurrido sin incidentes relevantes, a diferencia del pasado año cuando se quemó una bandera española que provocó disturbios. En esta ocasión tan sólo se han quemado unas cuartillas de pequeño tamaño con la bandera de España, si bien no ha provocado más altercados. Durante el transcurso de la protesta se han ido cantando consignas independentistas como "A mí nadie me engaña, Mallorca no es España" o "En Mallorca, en catalán".

Los independentistas han lamentado en el manifiesto que "la derecha más españolista de los últimos tiempos" tenga actualmente "vía libre en las instituciones". Los convocantes han criticado que se pretenda hacer creer que la "salida del pozo económico" pasa por la "eliminación" de los "derechos sociales y nacionales".

Así, han apuntado que se están cerrando medios de comunicación públicos e íntegramente en catalán, como la Ràdio i Televisió de Mallorca, al tiempo que se retiran partidas económicas destinadas a preservar y fomentar el catalán. También han criticado que se estén "pisando" servicios básicos como la educación y la sanidad argumentando que es "necesario para salir de la crisis".

Los convocantes han recordado que ya hace 25 años que se manifiestan con motivo del 31 de diciembre, "fecha que nos recuerda los orígenes catalanes de Mallorca".

Según han destacado, durante estos años la movilización ha sumado fuerzas "muy diversas", desde las que defendían un nacionalismo autodeterminista, hasta las que reivindicaban la independencia plena de los Països Catalans.

Ofrenda floral

El final de la manifestación ha coincidido con el inicio de la ofrenda floral al monumento del Rey Jaume I, que ha tenido lugar en la plaza de España de Palma, y en el que han participado diversas autoridades políticas de Baleares, así como representantes de instituciones y entidades sociales.

Hasta allí se han desplazado parte de los manifestantes independentistas que se han encontrado en la plaza con el Grupo d'Acció Baléà. Ambos colectivos han protagonizado un momento de tensión al enfrentarse y lanzarse insultos mutuamente, si bien los efectivos antidisturbios se han colocado entre ambos bandos para evitar que se produjeran altercados.

De este modo, la ofrenda de coronas ha discurrido entre gritos independentistas, por un lado, y consignas anticatalanistas por el otro como "Somos baleares, no catalanes".