Burgos afronta su nueva responsabilidad con "cierto vértigo" y reclama que "nadie espere tergiversaciones de datos"

Su escaño de diputado será ocupado previsiblemente por Ildefonso Pastor

El recién nombrado secretario de Estado de la Seguridad Social, Tomás Burgos, ha reconocido que afronta su nuevo cometido con "cierto vértigo" pero con la responsabilidad de hacerse cargo de "la columna vertebral" del Sistema de Bienestar, al tiempo que ha reclamado que "nadie espere tergiversaciones ni manipulaciones de datos".

En declaraciones a Europa Press, el diputado vallisoletano ha recalcado que el objetivo del Partido Popular será conseguir durante la Legislatura que comienza un sistema de pensiones "sostenible, solvente y sólido".

Tomás Burgos ha reflexionado sobre el "vértigo" que siente al encargarse de la Seguridad Social, un aspecto al que ha considerado como "la columna vertebral del Sistema de Bienestar" español, ya que cuenta con un presupuesto de en torno a 130 millones de euros y tiene una "importante incidencia en la vida de las personas".

El político vallisoletano, que ha ocupado escaño en el Congreso de los Diputados desde 1993, ha subrayado que en un momento de crisis económico como el actual las pensiones funcionan como "sustento de un buen número de familias" que no tienen más ingresos.

Burgos ha querido recalcar que asume el cargo de secretario de Estado con la "convicción" de que será complejo, pero ha recordado que cuenta con el conocimiento obtenido durante los años que lleva trabajando en la materia, pues desde 2002 ocupó el puesto de portavoz del PP en la Comisión de seguimiento del Pacto de Toledo.

En las últimas semanas, Burgos ha sido uno de los diputados 'populares' más implicados en el traspaso de poderes, participando en las reuniones entre el equipo dirigido por la nueva vicepresidenta. Asimismo, la ministra de Empleo, Fátima Báñez, ha confiado en él para revisar el estado de la Seguridad Social nada más llegar al Ministerio.

Después de unas jornadas de "ajetreo", Burgos se ha mostrado "orgulloso" de que su nombramiento por que coincide en el tiempo con el anuncio de que el Gobierno de Mariano Rajoy revalorizará las pensiones en un 1 por ciento en 2012, que como ha puntualizado era "uno de los compromisos" del Programa electoral y que significa, a su juicio, la "recuperación del espíritu del Pacto de Toledo".

El todavía diputado se ha referido a la estrategia de pensiones como un instrumento de "defensa" de los ciudadanos sobre todo en los momentos de dificultades económicas, por lo que ha insistido en su compromiso con garantizar las aportaciones.

"prudencia y realismo"

Del mismo modo, ha apuntado a la posibilidad de que el sistema de pensiones concluya 2011 con déficit, si bien ha preferido a esperar unas semanas a que se conozcan los datos definitivos. De hecho, también ha destacado que su labor se caracterizará por la "prudencia y el realismo" y ha reclamado que "nadie espere que se tergiversen datos ni se manipule la realidad".

Soltero de 49 años, Burgos es licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad de Valladolid y diplomado en Dirección de Instituciones Sanitarias por IESE, Instituto de Empresa y ESADE, así como máster ejecutivo en Gestión Sanitaria por la Universidad Antonio de Nebrija.

Entre 1987 y 1991 ocupó el cargo de procurador regional de las Cortes de Castilla y León y fue presidente nacional de las Nuevas Generaciones del PP entre 1990 y 1993. Su dilatada experiencia en el Congreso se remonta a 1993, si bien no fue hasta 2000 cuando entró a formar parte de la Comisión que supervisa todos los cambios legales en materia de pensiones desde 1997, como segundo del entonces portavoz, Jesús Merino.

Cuando Merino se convirtió en presidente de este órgano, Burgos pasó a ser el portavoz titular, puesto desde el que ha trabajado activamente en las dos últimas reformas del sistema de pensiones.

Como establecen las disposiciones de carácter político, el nuevo secretario de Estado de la Seguridad Social, tendrá que renunciar a su acta de diputado, por lo que ha explicado que echará de menos la Cámara baja después de 18 años en ella con una labor "muy gratificante" y una experiencia "muy enriquecedora". De hecho, ha aseverado que en la actualidad la imagen del Congreso "se ha deteriorado un poco".

Previsiblemente, su lugar en la Cámara lo ocupará el número cuatro de la lista del PP al Congreso, Ildefonso Pastor, si bien todavía quedan unas semanas para que se formalice la renuncia que, como ha recalcado Burgos, se lleva a cabo por aspectos de "incompatibilidad" y no de ilegalidad.

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