El expresidente de la Generalitat valenciana Francisco Camps ha recordado en la sala donde se le juzga por un delito de cohecho impropio en la 'causa de los trajes' derivada del 'caso Gürtel' que el magistrado-presidente del tribunal del jurado, Juan Climent, trabajó como asesor en el Gobierno socialista de Joan Lerma por lo que sabe que un presidente del Consell no tiene facultades para realizar adjudicaciones.

Así lo ha indicado, en la última parte de su declaración a preguntas de su letrado, que le ha interrogado por si había influido como presidente de la Generalitat en la adjudicación de contratos. Según ha dicho Camps, la situación funciona "exactamente igual que en los años 80 o 90".

"Nos hemos regido siempre igual, no podemos hacer indicaciones", ha dicho Camps, que ha considerado que, por ello, Climent es un "testigo de excepción" al haber trabajado en la Secretaría General de Presidencia como asesor de Lerma y, mirando al magistrado, ha señalado que sabe que Presidencia no tiene capacidad alguna para adjudicar nada.

"El sistema, que nació ya en los años 80 cuando la persona que nos preside formaba parte de ese gobierno —en referencia a Lerma— no ha variado el sistema de adjudicaciones, por eso me parece increíble que se ponga en tela de juicio", ha recalcado, tras pedir "perdón" porque se había "vuelto a entusiasmar".

Climent por su parte simplemente le ha pedido que no cuente "más cosas en exceso de lo que se pretende" ya que "solo le han preguntado si tienen facultades de contratación". "No", ha contestado el expresidente, a quien el magistrado le ha replicado: "tenga en cuenta que las leyes de contratación desde los años 80 hasta ahora han cambiado bastante".

Durante esta parte de la intervención, Camps ha defendido que el presupuesto de la Generalitat son 16.000 millones de euros y que, como presidente del Consell, en sus ocho años de gobierno, ha invertido 18.000 millones.

"Se puede calcular la cifra astronómica de adjudicatarias", ha dicho, y ha añadido que hay "cerca de 150.000 funcionarios, sistemas que tienen una tasación del procedimiento administrativo" por lo que "es imposible que nadie salte un papel, un sello o una barrera".

Así, ha defendido que hay "interventores, abogados de la Generalitat y todo sigue un mismo procedimiento", al tiempo que ha añadido que la Sindicatura de Cuentas controla "a año vencido". "Es imposible que se escape un euro por ninguna parte y las contrataciones se hacen por mesa de contratación", ha recalcado para defender que "obligó" a que esto mismo se hiciera con Fitur cuando llegó a la Presidencia de la Generalitat.

El magistrado-presidente también ha intervenido al final para, ante una de las precisiones de Camps, recordarle que le estaba preguntando el propio Boix. "Está interrogándole su propio letrado ayúdele un poquito", le ha pedido.