Un ataque con armas de fuego y artefactos explosivos en el centro de la ciudad belga de Lieja ha dejado al menos cinco muertos y 123 heridos, según el último balance facilitado por las autoridades belgas, aunque las fuentes médicas elevan a seis los fallecidos. Aunque en un primer momento se hablaba de tres autores, el alcalde de la ciudad, Willy Demeyer, ha confirmado que finalmente ha sido un solo individuo el que ha perpetrado el ataque este martes a mediodía sobre una multitud de personas que se encontraba en la céntrica plaza Saint Lambert de la ciudad.

Las autoridades locales han identificado como autor del ataque a un hombre residente en Lieja, Nordine Amrani, quien se habría pegado un tiro en la cabeza tras lanzar varios artefactos explosivos en la céntrica plaza y abrir fuego contra los viandantes con un fusil kalashnikov. Amrani, de 32 años de edad, fue condenado por asociación delictiva en septiembre de 2008 a 58 meses de cárcel, por posesión de 9.500 piezas de armas y una decena de armas completas, así como 2.800 plantas de cannabis. El coche del hombre con antecedentes penales ha sido encontrado en la propia plaza.

En cuanto a las otras víctimas mortales, han fallecido dos estudiantes de 15 y 16 años (Pierre Gérouville y Mehdi), una mujer de 75 años y un bebé de 17 meses. Otro joven de 20 años, que ingresó en el hospital en estado crítico por un traumatismo craneal, podría haber muerto, según fuentes médicas citadas por el diario Le Soir.

Aunque algunos medios apuntaban a que el ataque era un intento por liberar a un preso que se encontraba en los juzgados de la plaza, finalmente las autoridades belgas han desmentido esta información. La ministra belga de Interior, Joëlle Milquet, desvincula este atentado de cualquier organización terrorista, "se trata de un acto aislado con consecuencias dramáticas" ha añadido.

Según la agencia de noticias Belga, el atacante ha utilizado explosivos (algunos contra una parada de autobús en la que había varias personas) y un fusil tipo kalashnikov.

Testigos presenciales citados por medios belgas aseguran que se registraron hasta cuatro grandes explosiones acompañadas de disparos de un arma automática y otras deflagraciones menores.

El periodista Nicolas Gimenne, de la agencia Belga, explicó que salía del Palacio de Justicia de Lieja cuando vio a un hombre de pie sobre una de las terrazas que dominan la céntrica plaza Saint Lambert, con una bolsa a sus pies. "El hombre extrajo de la bolsa algo, pensaba que era una piedra o un objeto anodino. Ha lanzado algo a una veintena de metros, sobre las paradas de autobús, que ha explotado", explicó Gimenne.

El centro histórico de la ciudad (donde se celebraba el tradicional mercado navideño) fue acordonado y las personas que estaban en las calles se refugiaron en comercios y edificios públicos, mientras que los servicios sanitarios han instalado un puesto de emergencia en la zona. Los servicios de transportes, que estuvieron paralizados en toda la ciudad durante horas, han vuelto a funcionar, excepto en el perímetro de seguridad establecido tras el atentado.