La Delegación de Cultura de la Junta de Andalucía no pondrá "obstáculos" a la reforma exterior del Hotel Alhambra Palace tras el hallazgo de restos arqueológicos en las excavaciones de su nuevo aparcamiento subterráneo pero recuerda que no podrá elaborar su informe hasta que el propio establecimiento le remita la memoria con los resultados de los trabajos que ha ejecutado.

Así lo ha señalado a Europa Press el delegado provincial de Cultura, Pedro Benzal, que ha indicado que es la Administración Autonómica la que "está a la espera" de esa memoria, que el hotel tiene que elaborar tras los trabajos acometidos por el equipo de arqueólogos, respondiendo así al comunicado remitido este miércoles por el Alhambra Palace.

Este establecimiento, con 101 años, es el segundo hotel en activo más antiguo de España y el único que ha ostentado la misma propiedad desde su fundación, lo cual, según han informado en un comunicado, "les ha permitido seguir con la misma identidad todos estos años y haber cambiado lo mínimo posible su arquitectura y ornamentación".

Así, se ha adoptado la decisión de acometer reformas para adecuarse a las "comodidades y lujos del siglo XXI, pero sin abandonar esa identidad que le ha hecho único". En este sentido, las reformas se realizarán en dos fases: interior y exterior.

En cuanto a las reformas interiores, que ya están en marcha, el Hotel Alhambra Palace incorporará climatización de última generación en habitaciones estándar, 'junior suites' y zonas nobles, remodelará 16 cuartos de baño, instalará un nuevo montacargas de servicio y renovará de forma integral las cocinas y el saneamiento de la instalación eléctrica.

El hotel tiene previsto reabrir las puertas a todos sus clientes el 1 de abril de 2012, han precisado desde el establecimiento, y han comunicado, respecto a las obras exteriores, que no se puede establecer "ni una duración determinada ni una fecha de finalización, a la espera de la decisión que tome la Junta".

El establecimiento está situado dentro de la Ciudadela de la Alhambra, en un enclave protegido por la Unesco y a cinco minutos andando de la famosa Alhambra de la ciudad nazarí. Su color naranja Galatea de sus muros, la decoración neomudéjar y sus vistas panorámicas de Granada le otorgan "un aire de grandeza". Ha recibido también la Medalla de Oro de Granada.