El Ayuntamiento de Sevilla podría ahorrar 44,6 millones de euros anuales al externalizar la gestión de diversos servicios, lo que supone al menos un 20 por ciento sobre el presupuesto de cada partida a través de ciertas deducciones fiscales y del control del gasto.

Según los datos que maneja la firma internacional de auditoría y asesoramiento legal Russell Bedford, entre estos servicios se incluyen los relacionados con medio ambiente, gestión de infraestructuras, urbanismo y rehabilitación de edificios municipales.

La capital andaluza aprobó para 2011 un presupuesto de gastos no consolidado de 697 millones de euros, de los que más de 223 millones de euros se corresponden con partidas susceptibles de ser externalizadas. El área de Presidencia es la que obtendría un mayor ahorro en términos absolutos, con 32 millones anuales. Sólo esta cantidad ya serviría para liquidar casi el cien por cien de la deuda del municipio, que asciende a 34,2 millones de euros.

La firma de auditoría y asesoramiento legal ha identificado, sin embargo, la posibilidad de ahorrar en otras partidas del presupuesto. Así, en Urbanismo se podrían dejar de gastar casi seis millones de euros; el mantenimiento de parques y jardines podría llevarse a cabo por tres millones de euros menos, una cifra similar a la que se ahorraría el consistorio si dejara en manos del sector privado la conservación de edificios públicos y otras labores de rehabilitación. Además, la externalización de las tareas de conservación de patrimonio, así como las relativas al área de medio ambiente, supondría rebajar en otro medio millón de euros los gastos de la capital andaluza.

A nivel global, los ayuntamientos españoles podrían ahorrar casi 2.700 millones de euros anuales al externalizar únicamente la gestión de las áreas de urbanismo y residuos, que son las que concentran la cuarta parte de los gastos locales.

Tal y como destaca Russell Bedford, uno de los aspectos más positivos de la externalización de servicios municipales es, además del ahorro que supone, el saneamiento de sus cuentas, deterioradas tras casi cuatro años de crisis económica. El déficit de los consistorios españoles se ha disparado un 103 por ciento desde 2007, al pasar de los 3.200 a los 6.500 millones de euros actuales. La participación de la iniciativa privada en las áreas de urbanismo y residuos podría reducir ese nivel de déficit un 40 por ciento, hasta los 3.800 millones de euros, en el caso de que se destinase ese ahorro a mejorar el saldo presupuestario.

Russell Bedford reconoce que la situación actual de las Administraciones Públicas y la escasez generalizada de recursos obliga al planteamiento de "nuevas formas de gestión innovadoras" en la prestación de los servicios públicos que mantengan inalterada su calidad pero que a la vez consigan mejoras en los costes.

Las fórmulas de colaboración público-privada tipo PPP's, las empresas mixtas previstas en nuestro ordenamiento jurídico o las diversas fórmulas de gestión pública que la ley permite a la propia administración pueden ser, según Russell Bedford, "uno de los elementos clave a explorar en esta nueva situación".

Además del ahorro y la reducción del déficit, el socio fundador de Russell Bedford España, Gabriel Martínez, considera que la gestión privada de la prestación del servicio público, con el debido control por parte del mismo, es "conveniente porque es el elemento clave para asegurar la obtención de un coste adecuado, así como el cumplimiento de unos estándares de calidad mínimos". "Los costes de personal se racionalizan en función del mercado laboral y la eficiencia se logra con un dimensionamiento óptimo de las plantillas", añade Martínez.