La crisis de deuda soberana de la zona euro y el empeoramiento de las perspectivas de crecimiento mundial han acentuado la debilidad de la demanda y de la actividad económica española, que vuelve a apoyarse en el sector turístico, según el último boletín económico del Banco de España.

La entidad refleja además el favorable comportamiento de los saldos comercial y de servicios y, en menor medida, de las transferencias corrientes.

En los nueve primeros meses de 2011, el turismo ha registrado un saldo positivo de 24.934,3 millones, el 14,38 % más que en el mismo periodo del pasado año.

Por contra, los "ajustes" en el sector de la construcción, a un ritmo que "parece haberse acentuado", respecto a los meses centrales del año, y la "debilidad" en la evolución del valor añadido en la actividad industrial aportan la nota negativa en el cuarto trimestre.

El Banco de España destaca, por otra parte, que el déficit exterior por cuenta corriente fue de 33.980,4 millones de euros en los nueve primeros meses del año, lo que supone un descenso del 12,38 % con respecto al mismo periodo de 2010.

En los nueve primeros meses, el saldo negativo acumulado de la balanza comercial se situó en 32.063,1 millones, el 11,22 % menos que en el mismo periodo del pasado año.

Las importaciones (11,4 %) y las exportaciones (17,3 %) continuaron con su ascenso en tasa interanual y se redujo el déficit del componente no energético (73 %) frente a la ampliación del saldo negativo energético (22,3 %). En la balanza de servicios, el superávit acumulado hasta septiembre ascendió a 27.630,7 millones, el 23,25 % más que en el mismo periodo del año pasado.