Al menos 25 soldados paquistaníes han muerto y 14 se hallan heridos como consecuencia de los disparos realizados este sábado por helicópteros de la OTAN procedentes de Afganistán contra un puesto de control en la región paquistaní de Mohmand en el transcurso de una operación transfronteriza, según informaron fuentes del Ejército de Pakistán, que junto con miembros del Gobierno de Pakistán han condenado enérgicamente el incidente.

Según informó un portavoz militar a la cadena paquistaní GEO, al menos dos oficiales se encuentran entre los fallecidos por el tiroteo, que calificó de "indiscriminado" y "no provocado", sobre el puesto Salala, situado en la localidad de Baizai.

Por su parte, el militar encargado de transmitir el último balance aseguró bajo condición de anonimato a la agencia Reuters que "el último ataque de las fuerzas de la OTAN tendrá serias repercusiones, porque atacaron sin motivo alguno y mataron a los soldados mientras estaban durmiendo".

El embajador en funciones de Pakistán en EE UU, Iffat Gardezi, se ha sumado a la condena del ataque y ha instado al Ministerio de Exteriores paquistaní a que traslade "sin dilación" una protesta al Gobierno estadounidense.

La OTAN se ha limitado a reconocer la existencia de "un incidente" cerca de la frontera con Afganistán, que está "pendiente de investigación".