Un escritor de éxito encabeza como independiente la nueva candidatura de ERC, que se presenta en coalición con Reagrupament. Tras liderar las consultas soberanistas, Alfred Bosch reivindica el derecho a decidir "con un gran referéndum oficial, encarrilado a través de las instituciones". Y para eso ha entrado en política.

¿ERC necesitaba un lavado de cara, un relevo?

Necesitaba adaptarse a los nuevos tiempos. Cosa que a todos los partidos les iría bien hacer, porque el desprestigio de la política es considerable. ¡Han pasado cosas muy gordas! La sentencia del Estatut, un millón de personas saliendo a la calle pidiendo la independencia. Las consultas soberanistas, un millón de personas votando y votando, la mayoría que sí, incluidos Pujol y Mas. Las sentencias  atacando la inmersión lingüística en las escuelas catalanas y el movimiento de los indignados, las protestas por los recortes. Y por eso se ha renovado de arriba abajo el partido, sumado a los varapalos electorales consecutivos de Esquerra.

¿Qué papel tendrá que hacer en el Congreso? Será complicado...

No. Si se confirman las encuestas, habrá una mayoría absolutísima del PP, por tanto, nuestra posición está clara: aguantar y con la voz alta y clara decir que queremos la independencia y que queremos irnos de España y que, por favor, comencemos a hablar civilizadamente antes de que esto se convierta en un problema gordo.

Quiere formar grupo con la izquierda abertzale. ¿Se entiende con ellos?

Antes que entendernos con IU, nos podríamos entender con Amaiur. No hay ningún obstáculo, porque ahora ETA ha renunciado a las armas. Ahora nos parecemos mucho más, buscamos la libertad nacional por medios pacíficos y democráticos. Pero esto no quiere decir que lo tengamos clarísimo y que lo podamos hacer.

¿De dónde sacamos el dinero para evitar los recortes que tanto critican?

De Madrid. ¡Allí es donde está el gasto suntuario!

¿Recortar, pero en Madrid?

En el Estado. Cultura, Educación, Sanidad, son tres ministerios fantasma, está todo traspasado. Podrían ir en una secretaría y generaría un ahorro enorme, no habría que cerrar un ambulatorio, ni congelar sueldos de maestros... Lo que es casi un delito escandaloso es que todo esto lo estamos pagando nosotros.

Las medidas para evitar el rescate de España, ¿son legítimas viniendo de un gobierno de izquierdas? ¿Zapatero se equivocó aplicándolas?

Hizo de telonero del PP porque todas eran medidas neoliberales. Quizá eran necesarias, pero un gobierno de izquierdas debería haberse cuidado de que estas medidas fueran acompañadas de una cierta custodia social. Evidentemente que hemos de salvaguardar los ahorros de la gente, pero después debes marcar a las entidades, porque ahí hay dinero público. No pueden repartir dividendos ni primas a sus directivos, porque en buena parte son los responsables de lo que está pasando. A algunos se les debería exigir responsabilidades, penales si es preciso.

¿Cree que España se ha librado ya de un rescate?

Podría ser que España hubiera tenido que ser rescatada si Cataluña no la hubiera rescatado consecutivamente durante tantos años. El déficit fiscal de Cataluña es un rescate encubierto durante mucho tiempo, porque los catalanes hemos estado pagando las facturas muy por encima de lo que nos correspondía. Pero Cataluña no es Grecia, Cataluña no ha estado viviendo por encima de sus posibilidades, sino por debajo, porque estaba entretenida con un gran rescate que era el de la economía española. El rescate ya se ha producido.

BIO. Barcelona, 1961. Escritor, ensayista y profesor de Historia en la Universitat Pompeu Fabra. Fue portavoz de la plataforma cívica Barcelona Decideix, que organizó las consultas independentistas. Es uno de los autores más premiados en catalán.