La cinta está protagonizada por Tom Hanks, al que se unirán una serie de estrellas que desfilarán por la Croisette para mezclar el negocio de entrevistas y photocalls con el placer de las fiestas, los yates de lujo y los hoteles exclusivos durante 12 días.

Ron Howard, director de la adaptación cinematográfica del superventas de Dan Brown, ha desatado una nueva ola de protestas entre los cristianos al sugerir que Jesucristo se casó con María Magdalena y crearon una dinastía, encubierta por la Iglesia de todas las formas posibles.

Los llamamientos del Vaticano a boicotear la película y un boom en publicidad religiosa destinada a desacreditar la novela han dado al estudio, Sony Pictures, la clase de publicidad que no puede comprar.

"No creo que sea una película que tuviera la intención de ser controvertida", dijo el periodista de Hollywood Gregg Kilday. "Pretendía ser un reluciente thriller habitual en Hollywood. Pero debido a que los elementos religiosos en el libro han atraído la atención a muchos líderes religiosos (...) promete ser un gran y controvertido inicio del festival".

Almodóvar, con volver

Aparte de "El código Da Vinci", Cannes promete ser una mezcla de obras políticas, experimentación sexual y taquillazos dignos del mayor festival del mundo.

Otras importantes producciones estadounidenses incluyen "X-Men: The Last Stand", con Hugh Jackman y Halle Berry, y la animada "Over the Hedge", donde Bruce Willis pone su voz.

Pedro Almodóvar, que hoy podría ganar el Premio Príncipe de Asturias de las Artes, regresa a Cannes con "Volver", protagonizada por Penélope Cruz, y la estadounidense Sofía Coppola presenta "María Antonieta", en la que Kirsten Dunst interpreta a la joven reina mientras Francia se dirige a la sangrienta revolución.

Mucho gramour

Además de por el cine, el Festival de Cannes es famoso por su glamour.

Cientos de fotógrafos y cámaras de televisión de todo el mundo ya se han desplazado hasta allí para no perderse detalle de los paseíllos por la alfombra roja.

El cubierto más barato de la cena cuesta 3.000 euros.

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