La edad de oro de la fotografía de Albania sale a la luz

  • Una exposición en París recupera el legado fotográfico del país durante el final del siglo XIX y principios del XX.
  • En esta época Albania era la meca fotográfica de los Balcanes.
  • El gran pionero fue Pietro Marubi, un lugarteniente de Garibaldi, que retrató a toda la sociedad albanesa. Su familia reunió 120.000 negativos.
Una de las fotos de la inmensa colección de la 'dinastía' de fotógrafos de la familia Marubi
Una de las fotos de la inmensa colección de la 'dinastía' de fotógrafos de la familia Marubi
© Pjetër Marubi
Una de las fotos de la inmensa colección de la 'dinastía' de fotógrafos de la familia Marubi

Es difícil imaginar la enorme importancia que tuvo la fotografía en Albania. El rastro del legado fotográfico del país fue borrado por la negra dictadura de Enver Hoxa, el político alucinado y paranoico que aisló a la república del resto del mundo entre 1944 y 1985.

Durante su régimen, la fotografía era considerada una perversión burguesa, sólo admisible si se dedicaba a engrandecer la visión nacional del dictador o su personalidad megalómana. Sin embargo, Albania había sido el territorio más fructífero fotográficamente hablando de la zona de los Balcanes.

La exposición L'âge d'or de la photographie albanaise (1858-1945) (La edad de oro de la fotografía albanesa), que exhibe en París (Francia) la Maison Européenne de la Photographie, saca a la luz una selección deslumbrante de las imágenes pioneras de aquella tradición.

Gran influencia otomana

En la muestra hay evocadoras piezas que revelan la gran influencia del Imperio Otomano sobre la sociedad albanesa. Hay retratos de héroes nacionales, pero también de personajes anónimos, piezas de estudio, paisajes, escenas cotidianas de carácter documental y fotos de tema religioso, sobre todo de funerales, tanto cristianos como musulmanes.

Quizá porque se trata del país de los aoidos, contadores de historias trasladadas de boca o oreja desde tiempos de Homero, los fotógrafos albaneses sentían la necesidad de actuar como poetas de la luz, dando a sus obras un carácter mixto entre lo histórico y lo legendario.

El gran descubrimiento de la exposición es Pietro Marubi, un italiano lugarteniente de Garibaldi que llegó a Albania escapando de la represión y la persecución política en Italia. Se estableció al noroeste del país, en la ciudad de Shkodra, uno de los nudos económicos y culturales más importantes de la república. Allí abrió el primer estudio fotográfico del país en 1958.

La llamada Dinastía Marubi, de tres generaciones, retrató a toda la sociedad albana en el estudio de Shkodra, frente a foros con paisajes pintados. Vagabundos, ladrones, artesanos, políticos, intelectuales e incluso miembros de la corte del Rey Zog  I pasaron por las instalaciones. La familia llegó a reunir una colección de 120.000 negativos durante los casi cien años en que se dedicaron a la fotografía.

Gran parte de estas fotos, perdidas durante los años de hierro de la dictadura comunista, han comenzado a ser recuperadas por los historiadores en los últimos tiempos.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento