La Fundación Proave ha valorado este miércoles la decisión de la Comisión Europea (CE) de incluir el Corredor Mediterráneo como uno de los diez ejes prioritarios que propone que reciban financiación europea a partir de 2014.

Asimismo, ha exigido que la designación de eje prioritario se acompañe de un "claro compromiso" de los gobernantes "por una pronta ejecución, lo que supone su reflejo en los presupuestos, para que el acceso a Europa desde la Comunitat Valenciana en ancho europeo para tráfico de mercancías sea una realidad antes del año 2016".

En un comunicado, esta entidad también ha considerado positivo la inclusión de otros ejes y ha aplaudido que "de una vez por todas se haya roto con el tradicional esquema radial de los ferrocarriles españoles, en beneficio de un sistema de malla".

También ha destacado la "excelente" labor desarrollada por el Ministerio de Fomento, así como la "unidad" del mundo empresarial, sociedad civil y clase política de todas las comunidades autónomas por las que discurre el mismo, "sin los cuales estos logros no hubieran sido posibles".

La Fundación Proave considera que para la Comunitat Valenciana la inclusión del Corredor Mediterráneo como eje prioritario de la Red Transeuropea de Transporte significa poder contar con un acceso ferroviario a Europa en ancho europeo para el transporte tanto de mercancías como de pasajeros y a velocidades "hasta ahora impensables" y situar las mercancías "a menor coste y con mayor rapidez en los mercados europeos".

Asimismo, supone convertir al puerto de Valencia en "nexo de unión" entre Asia y Europa, impulsar una "potente" plataforma logística intermodal, motor del cambio económico y de la transformación de nuestro sistema productivo y reducir el impacto medioambiental del tráfico de mercancías.

Esta fundación también ha subrayado la "importancia" en términos de Producto Interior Bruto (PIB), población, exportaciones, tráfico portuario e industria del Corredor Mediterráneo para que "se priorice frente a cualquier otro". Así, entiende que la ejecución de los distintos ejes "debe atenerse al criterio del máximo impacto y retorno económico".

Al respecto ha señalado que, dado que la conjugación entre sistema portuario y sistema ferroviario hace del Corredor Mediterráneo el de "mayor potencial de crecimiento", de diversificación del tejido productivo nacional y de desarrollo de la intermodalidad, "resulta evidente que deba concedérsele la máxima prioridad". "Con un despliegue de norte a sur para rentabilizar lo antes posible la inversión", ha puntualizado.