Samuel dice que el día del crimen "no pisó" León XIII y afirma desconocer dónde está el cuerpo

Asegura que el 24 de enero de 2009 estuvo en Montequinto y revela que colaboró con el Grume para "sacarle información" a Carcaño
Juicio Marta Del Castillo
Juicio Marta Del Castillo
EUROPA PRESS
Juicio Marta Del Castillo

Samuel Benítez, uno de los cuatro acusados por el caso Marta del Castillo, ha asegurado este miércoles que el día 24 de enero de 2009 "nunca pisó" el domicilio de León XIII donde se produjo el crimen y ha asegurado, a preguntas de la acusación particular que ejercen los padres de la víctima, que "no sé dónde está el cuerpo de Marta ni le he preguntado a ninguno de ellos —en referencia a los otros tres imputados— dónde está" el cadáver. "No lo sé", ha contestado a la misma pregunta planteada por el fiscal.

Durante su declaración ante el tribunal encargado de enjuiciar este caso, que se ha prolongado por espacio de cerca de dos horas, Samuel Benítez ha asegurado que todo lo afirmado este martes por Miguel Carcaño en cuanto a su participación en la desaparición del cuerpo "es totalmente mentira", y ha aseverado que declaró que arrojaron el cadáver al río Guadalquivir por las "coacciones" y "amenazas" de la Policía, pues "en el momento de mi detención me dijeron que, o me inculpaba, o irían a por mis padres o por la que era entonces mi novia".

"Todos los detalles" ofrecidos en esa declaración "son falsos", a lo que ha añadido que la Policía "me indicó paso por paso lo que tenía que decir, y yo sólo asentía; la Policía cogió un bolígrafo y una hoja en blanco, dibujó el puente, el carril bici y el bordillo, y me dijeron que tenía que marcar el lado derecho" como el sitio de la pasarela de Camas "donde habíamos arrojado el cuerpo" de Marta, incidiendo además en que lo declarado por Carcaño en cuanto a su participación "es totalmente mentira". Ha dicho que, incluso, "recibí agarrones del cuello y golpes en la cara y en el pecho" por parte de los agentes.

Ha indicado que, antes de que se produjera la detención del asesino confeso, el Grupo de Menores (Grume) de la Policía "me comentó que podía colaborar con ellos y sacarle información a Miguel, por lo que le llamé y le mandé varios mensajes por el 'Tuenti', todo ello infructuoso". Tras ello, y estando ambos en dependencias policiales para declarar como testigos, "le dije que si sabía algo, que me lo dijera, pero el me dijo que no tenía nada que ver, y me miró como diciendo 'ahora tú te vas a enterar'", por lo que ha atribuido la declaración de Carcaño a una "represalia" por su colaboración con la Policía.

De cumpleaños en montequinto

Respecto a lo sucedido el día 24 de enero, Samuel Benítez ha relatado que estuvo hasta las 19,00 horas en un cumpleaños en Montequinto, momento en el que se fue junto a su entonces pareja a un parque de la zona, donde estuvieron hasta las 21,30 horas. Tras ello, "me acompañó hasta una hamburguesería, donde había más amigos, y ella se fue a cambiarse a su casa"; en este local estuvieron hasta las 23,00 horas, tras lo que, ya en compañía de su entonces novia, marcharon hacia un pub.

Asimismo, ha precisado que, mientras estaba en el parque, recibió una llamada del menor en la que éste "me dijo que estaba de 'botellón' en las inmediaciones del Pabellón de San Pablo, y que si iba a Sevilla y me iba a quedar a dormir con él, porque yo al día siguiente trabajaba". "La conversación la puse en manos libres, porque el 'Cuco' estaba ebrio y me hacía gracia", ha expresado.

Posteriormente, una vez en el pub, recibió una llamada de la mejor amiga de Marta en la que ésta "me preguntó si sabía algo de Miguel o de Marta, si había hablado con ellos, pero le dije que no, que estaba en Montequinto", tras lo que, como no tenía saldo en su teléfono móvil, "le dije a la primera de mi novia que llamara a Miguel para que me llamara, porque quería saber dónde estaban y si habían tenido un accidente", cosa que hizo para comunicarle que había dejado a Marta en su casa de la calle Argantonio en torno a las 21,30 horas, y que ya estaba en la casa de Camas donde convivía con su novia menor de edad y la familia de ésta.

Niega que apagara su móvil el día de los hechos

En el pub, según su relato, estuvieron hasta cerca de las 2,00 horas, cuando su entonces novia le acompañó hasta la parada de autobús para marcharse a Sevilla; se montó en el autobús, se bajó en el Prado de San Sebastián y fue hacia su casa, "donde me llama la mejor amiga de Marta, me dice que están en Triana, y decido unirme a la búsqueda". Así, se incorporó a la búsqueda, "en la que participé de forma activa", y fue a la casa de León XIII, aunque "me quedé fuera y entraron otras personas adultas".

De este modo, no ha podido precisar si el hermano del asesino confeso permitió el acceso al domicilio. "No lo sé, porque no entré yo", ha dicho, al tiempo que ha afirmado que, en los días de búsqueda, "me extrañó que Miguel no quisiera buscar a Marta".

Samuel, que ha subrayado que "no tuve apagado el móvil" el día de los hechos —"siempre tengo el móvil encendido, nunca lo apago"—, ha negado además que nadie de su familia tenga un Opel Astra de color rojo granate, ya que, según Carcaño, Samuel y el 'Cuco' se deshicieron del cuerpo en un coche de estas características conducido por el primero de ellos. "No tenemos un Opel Astra, ni rojo ni blanco ni de ningún color", ha aseverado.

El acusado, que ha dicho recordar que en el piso de León XIII había una silla de ruedas, ha negado que en los días posteriores al crimen limpiara junto al 'Cuco' el coche del padre de éste; "no lo limpiamos, su padre nos dio tres euros para que lo aspiráramos por dentro, sólo las alfombrillas".

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