El candidato del PSOE a la Presidencia del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha asegurado este martes que a él le habría gustado celebrar más debates con el líder del PP, Mariano Rajoy, pero ha revelado que, si se ha acordado sólo uno, es porque la alternativa "probablemente era cero".

En rueda de prensa, Rubalcaba ha garantizado que el quería "cuantos más debates mejor", convencido de que "no son un derecho de los candidatos, sino de los ciudadanos".

Preguntado sobre el si el PSOE ha renunciado a luchar por la victoria electoral ante el previsible triunfo del PP, ha querido dejar claro que él está "dando la batalla" y lo seguirá haciendo "hasta el último momento".

Finalmente los equipos de campaña han fijado un único cara a cara para el 7 de noviembre.

Preguntado por la intención de Rubalcaba de realizar más de un debate electoral, el  vicesecretario de Comunicación del PP, González Pons ha aclarado que si el candidato socialista hubiera preferido hacer "dos o tres debates, lo hubiera planteado" durante la negociación entre ambos partidos.

"No tiene sentido abrir un debate sobre cuántos hubiera preferido Rubalcaba. En su mano ha tenido proponer los que ha querido, y no lo ha propuesto porque a lo mejor realmente tampoco quería", declaró.

Tambén ha valorado que el "cara a cara" electoral entre el candidato de su partido y el del PSOE se celebre en la Academia de la Televisión pues permitirá darlo a las cadenas que lo deseen y "es una opción que conviene a todos".

El también cabeza de lista del PP al Congreso por Valencia ha defendido que el cara a cara se celebre en la Academia como la "mejor opción", frente a la propuesta del PSOE de realizarlo en TVE e incluso frente a la su propio partido, que planteó realizarlo en Antena 3 y Tele 5.

20minutos.es ha propuesto oficialmente un ciberdebate electoral entre Mariano Rajoy y Alfredo Pérez Rubalcaba, abierto a todos los medios on line, grandes y pequeños, incluidos blogs de actualidad.

Este medio estudió  la posibilidad de invitar al ciberdebate a todos los cabezas de lista de los actuales grupos parlamentarios y a los líderes de formaciones aún extraparlamentarias, que cuenten con opciones razonables de entrar en el Parlamento. Finalmente se optó por proponer el debate  solo a los dos líderes con opciones reales de convertirse en el próximo presidente del Gobierno, ya que parecía más factible conseguirlo.