Covite ha afirmado que, tras la conferencia internacional desarrollada este lunes en San Sebastián, las víctimas esperan "descorazonadas" el siguiente "acto de este vodevil" que terminará, "si la sociedad no lo remedia, con la impunidad de la barbarie". En este sentido, ha considerado "un escarnio" que los gobiernos central y vasco permitan que "se hable en semejantes términos" y se equipare "nuestra democracia con una banda terrorista".

En un comunicado, la asociación de víctimas del País Vasco ha señalado que, una vez finalizada la conferencia de San Sebastián, "ya podemos esperar, descorazonadas las víctimas y tranquilos los asesinos, el siguiente acto de este vodevil, previamente marcado, que terminará, si la sociedad no lo remedia, con la impunidad de la barbarie más cruenta de nuestra reciente historia democrática".

Tras reiterar que la reunión "estaba hecha y pensada por el mundo proetarra y con el único objeto de satisfacer a dicho mundo", ha lamentado que los "autodenominados mediadores" no atendieran su petición de que "no utilizasen la expresión conflicto" y que "se preocupasen de conocer la realidad de los hechos".

En este sentido, ha denunciado que, "sin salirse del guión impuesto", la declaración hecha pública al término de la conferencia ha dejado "muy claro", en sus cinco puntos "sin consistencia alguna", que "lo que existe en Euskadi no es una banda terrorista cuyo único objeto es atentar contra el Estado de Derecho sino, según sus palabras, la última confrontación armada de Europa".

De este modo, ha censurado que los expertos internacionales, "cuyos ingresos económicos por este acto desconocemos" tanto en su cuantía como en su procedencia, "han utilizado tantas veces como han querido el término 'conflicto' y han instado a estados democráticos, como España y Francia, a un diálogo con ETA y a que debatan cuestiones políticas con lo que ellos han denominado 'actores no violentos', es decir, siguiendo sus propios actos, con el brazo político de ETA".

Para Covite, "resulta un escarnio que personas de este tipo nos hablen en semejantes términos y que nuestros gobiernos, tanto central como autonómico, lo permitan". "Si nuestros representantes aceptan que se equipare a nuestra democracia con una banda terrorista y que su brazo político, al cual se han preocupado previamente de legalizar, pueda sentarse en un plano de igualdad a debatir cuestiones políticas es que realmente la brújula de este país está totalmente perdida", ha advertido. RECONCILIACIÓN

Asimismo, ha pedido a los representantes internacionales que "no nos hablen de reconciliación ya que dicha palabra significa atraer y acordar los ánimos desunidos entre al menos dos partes contendientes, y aquí, en nuestro país, nunca ha habido en los últimos cincuenta años partes contendientes que hayan de reconciliarse".

Por ello, les ha instado a que, a pesar de que "el mundo de ETA, nutridamente representado en su conferencia, les insta a usar esta terminología", no la utilicen porque "están incurriendo en un grado de perversión no acorde a lo que, sin éxito alguno, tratan de representar".

Finalmente, ha asegurado que las víctimas están "descorazonadas" pero también "orgullosas" porque en la jornada de este lunes, "en un clima creado para la propaganda etarra, diez víctimas de terrorismo supieron tener el coraje y la determinación de enfrentarse una vez más a la injusticia, poniendo de manifiesto la memoria de los 858 asesinados, blandiendo para ello el uso de la razón y la palabra contra lo que ha sido la práctica de los hoy denominados 'no violentos', el tiro en la nuca".