Gesto inédito. Sin precedentes. Los presos de ETA anunciaron este viernes en un comunicado que suscriben el 'Acuerdo de Guernika', del que se cumple precisamente un año. Este acuerdo, al que ahora se suman los presos, aboga por el fin definitivo de la lucha armada y el reconocimiento y reparación de las víctimas del terrorismo.

Un portavoz del EPPK, el colectivo oficial de los presos etarras, fue el encargado de leer el comunicado. Los reclusos etarras han estado casi un año debatiendo si se adherían o no al 'Acuerdo de Guernika', que el 25 de septiembre de 2010 firmaron un portavoz de la ilegalizada Batasuna, Eusko Alkartasuna, Aralar, Alternatiba y AB. El texto defiende el diálogo político y rechaza la violencia.

La suma del EPPK supone la adhesión del 90% de los presos etarras, incluidos sus dos portavoces: Juan Lorenzo Lasa Mitxelena, alias Txikierdi, exjefe militar de ETA; y Ana Belén Egües, fieles seguidores de la ortodoxia etarra.

El paso dado por los presos de ETA (el EPPK está formado por 688 etarras) es único en la historia de la banda, que siempre ha apostado por la expulsión de aquellos que no cumplían y seguían sus directrices o por aquellos que hacían público el daño que ha hecho ETA. Fuentes antiterroristas reconocen la importancia de este comunciado, pero recuerdan que los presos no han defendido en él la disolución de la banda armada ni la entrega de armas.

El comunicado se produce además días antes de que se celebre el Gudari Eguna (Día del Soldado Vasco), una fecha que ETA suele aprovechar para hacer algún tipo de anuncio. Analistas de los servicios antiterroristas creen, como ya publicó 20 minutos la semana pasada, que ETA no hará ningún comunicado que  satisfaga las expectativas del Gobierno.

Es decir, aquel que anuncie el abandono definitivo de la lucha armada aunque no se hable de disolución. Es más, "si se produce algún tipo de comunicado, se espera que ETA exiga al Estado qué de ciertos pasos, como la derogación de la doctrina Parot o la vuelta de los refugiados para poder hablar así de la disposición de la banda a abrir un proceso de disolución", señalan las mismas fuentes.

En su comunicado enviado a Gara, el colectivo de presos de ETA ha opinado que el acuerdo se ha convertido en "la referencia" para la construcción de un escenario democrático y que en esa medida tiene también su apoyo. "Por encima de los límites y los obstáculos de los Estados que nos tienen cautivos, EPPK manifiesta su compromiso firme de empujar para avanzar en el proceso democrático", ha señalado el colectivo.

Pese a aceptar que lograr que ese escenario democrático "no es un reto cualquiera", los presos de ETA recalcan su "convencimiento" de conseguirlo y anuncia su "compromiso total con impulsar el proceso democrático hasta el final". Los firmantes del Acuerdo de Gernika enviaron en junio pasado una carta a este colectivo de presos de ETA para detallarles su propuesta. La intención inicial de los firmantes era reunirse con los presos etarras para informarles del "proceso político abierto en Euskal Herria", pero no recibieron autorización de Instituciones Penitenciarias. Por este motivo, les remitieron la carta.

Tras hacerse público el comunicado, el secretario general del Grupo Socialista en el Congreso de los Diputados, Eduardo Madina, ha dicho es "una noticia importante" porque "no habíamos visto nada parecido".

Madina ha indicado que este anuncio "vuelve a incidir en lo de siempre, que ETA está a las puertas de entrar en una fase que no tiene marcha atrás, y es una fase de disolución definitiva".

El portavoz del PP del País Vasco, Leopoldo Barreda, ha subrayado que la petición que hay que hacer a los presos de ETA es que exijan a la banda terrorista su disolución "definitiva e incondicional", que colaboren con la Justicia y que reconozcan el daño causado durante todos estos años. Barreda ha opinado que este tipo de anuncios contribuyen a la "confusión" y ha insistido en que lo que hay que pedir a la banda y a los terroristas es la disolución de ETA.

El presidente del PNV, Iñigo Urkullu, ha asegurado, tras conocer el comunicado de los presos etarras, que "hoy el final de ETA es más irreversible".

La secretaria de organización de Aralar, Rebeka Ubera, se ha congratulado de la decisión del colectivo de presos porque es "un paso cualitativamente importante, por lo que supone de irreversibilidad del proceso de paz".

La dirigente de Aralar ha resaltado también el apoyo al acuerdo del colectivo de presos etarras disidentes de la cárcel de Nanclares, anunciado en otro comunicado. Este otro colectivo de presos etarras, disidentes con la línea oficial de la banda terrorista e internos en la prisión alavesa de Nanclares de la Oca, han emitido también un comunicado en el que también se unen al Acuerdo de Gernika.

Estos presos, que se autodenominan "comprometidos con el irreversible proceso de paz", han expresado su apoyo total al Acuerdo de Gernika "en todos y cada uno de sus puntos" y también han opinado que "es hora de abordar sin dilación el reconocimiento y la reparación de las víctimas y la reconciliación social".