La Fiscalía de Sevilla ha elevado a definitiva su petición de 25 años de cárcel para una mujer de 30 años de edad acusada de apuñalar mortalmente en Guillena con un machete de cacería de 30 centímetros de hoja a un familiar de su exmarido que se negó a entregarle parte del dinero de la jubilación, según han informado a Europa Press fuentes del caso.

Durante el juicio con jurado popular que se está celebrando en la Audiencia Provincial de Sevilla, el representante del Ministerio Público ha solicitado finalmente para la acusada 25 años de cárcel y el pago de una indemnización de 61.640 euros por un delito de asesinato, la misma pena que ha pedido la acusación particular ejercida por la familia de la víctima.

De su lado, la defensa de la procesada ha solicitado la libre absolución de su patrocinada y, en el caso de que el jurado popular considere en su veredicto que es culpable, que sea condenada como cooperadora necesaria de un delito de homicidio. Durante su declaración, la acusada aseguró que fue su novio, ya fallecido, quien asesinó al anciano el día 8 de marzo del pasado año 2010.

Los hechos

Según relata el Ministerio Público en su escrito de acusación, consultado por Europa Press, los hechos tuvieron lugar entre las 00,00 y las 6,00 horas del día 8 de marzo de 2010, cuando la acusada, M.M.B., acompañada de su pareja —ya fallecida—, se aproximó al domicilio de la víctima, lugar al que acudía "con frecuencia" desde que se separó de su exmarido "a pedirle dinero".

En este sentido, añade que, con ese propósito, la imputada "siempre había acudido sola" a dicho domicilio, pero esa noche fue en compañía de su actual pareja, "ya que sabían que acababa de cobrar su jubilación", llevando entre sus ropas un machete de cacería propiedad de la encartada "de grandes proporciones", concretamente de 30 centímetros de hoja por cinco centímetros de ancho, aparte la empuñadura.

De este modo, y según el fiscal, una vez en el lugar de los hechos, la víctima abrió "confiado y sin ninguna prevención, por cuanto conocía" a la acusada, que entró en el piso acompañada de su pareja, pero "como quiera que el fallecido se negó a entregar dinero, fue salvajemente acuchillado con el machete, hasta causarle la muerte".

HASTA 14

Heridas de arma blanca

Así, sufrió once heridas por arma blanca en el cuello, el tórax y el abdomen, heridas que "son de ataque" a la víctima, afectan a los órganos vitales y "se presentan como un ataque reiterativo, teniendo como objetivo todo el cuerpo" del finado. Asimismo, éste presenta tres heridas de defensa por arma blanca en la mano izquierda.

El fiscal explica que las heridas "provocan graves lesiones internas de carácter mortal", como por ejemplo una herida en el cuello con sección de la tráquea, agresiones que "fueron realizadas con mucha fuerza con la clara intención de acabar con su vida", ya que las puñaladas "fracturaron varias costillas y atravesaron o seccionaron arterias, pulmón y corazón, entre otras".

Seguidamente, y según el Ministerio Público, los acusados limpiaron el machete, registraron la casa llevándose una cantidad indeterminada de dinero y la cartilla de ahorros de la víctima, tras todo lo cual se fueron a su domicilio, también de Guillena, "y pocas horas después llevaban juntos al colegio a los hijos" de la acusada, visitaron a la madre del acusado "y se hacían ver ante amigos y vecinos, que aún ignoraban lo ocurrido".

Hallado muerto por un hermano

Fue sobre las 11,00 horas del 8 de marzo cuando un hermano del fallecido fue a buscarle para pasear con otros vecinos y le encontró muerto en el salón de la casa. Añade el fiscal que la imputada no presenta ningún trastorno mental ni de la personalidad y es consumidora de cocaína desde su separación.