El ex alcalde de San Sebastián, Odón Elorza, ha manifestado que no comparte la sentencia de la Audiencia Nacional que condena al ex portavoz de la ilegalizada Batasuna Arnaldo Otegi y al ex dirigente de LAB Rafa Díez Usabiaga por el 'caso Bateragune' al considerar que actuaron como dirigentes de ETA al intentar reconstruir la formación ilegalizada a través del proyecto 'Bateragune', y ha destacado que "crear nuevos victimismos en momentos de transición sólo favorecen a las posiciones independentistas más radicales".

En un artículo publicado en su blog, recogido por Europa Press, Elorza ha recordado que es "muy crítico" con el papel que realiza Bildu "hasta hoy", pero ha apuntado que "la realidad socio-política" del País Vasco con la etapa iniciada para lograr la desaparición de ETA "no es coincidente" con la valoración que hacen los jueces en su sentencia.

En esa línea, ha apuntado que la decisión del tribunal le produce "perplejidad" por "su dureza y por sus argumentaciones", y ha señalado que, "siendo muy crítico con la falta de valentía de Bildu al no pedir la desaparición definitiva de ETA, al no hacer gestos de ética democrática hacia las víctimas de ETA y por los comportamientos inmorales de Garitano", no puede compartir los análisis de la realidad política que hacen los jueces de la Audiencia Nacional.

"En estos momentos, y tiene su lógica, la legalidad vigente no puede contemplar el nuevo posicionamiento político de la antigua Batasuna, representada por Otegi, Diez y compañía, pero incluso desde el juicio de legalidad, la condena me resulta totalmente disparatada", ha afirmado.

Proceso de paz

El ex primer edil donostiarra ha recordado que Euskadi está "tratando de garantizar el buen fin del llamado proceso de pacificación con el objetivo del abandono de las armas por ETA, la victoria de la democracia sobre el terrorismo, el control judicial sobre Bildu para que acomode sus comportamientos a las leyes y a los principios democráticos y la defensa de una Paz con Memoria".

Además, ha insistido en que esta sentencia, aunque la respeta, merece su discrepancia desde una posición política que "trata de hacer posible la paz y el respeto a la legalidad". "Soy consciente de las dificultades que ello entraña y, de igual manera, estoy a la expectativa de que se produzca la legalización de Sortu para ver si es posible acelerar el proceso de paz y la construcción de la convivencia", ha señalado.

No obstante, ha subrayado que "los falsos victimismos juegan en favor de los independentistas radicales que tratan de atacar la coherencia del Estado de Derecho", y ha recordado que, en las recientes elecciones municipales, Bildu "salió favorecida por las actitudes de la Justicia en relación con su legalización".

"Confío en el mejor juicio del Tribunal Supremo sin que ello signifique, en absoluto, que tengamos que bajar la guardia ante actitudes concretas que atacan las leyes o implican burla de las instituciones", ha concluido.