Claves para entender la oleada de violencia callejera en Reino Unido

  • La Policía británica es el objetivo principal de los ataques.
  • Los disturbios comenzaron tras la muerte de un hombre de raza negra en el barrio de Tottenham por un presunto disparo de un agente de policía.
  • La violencia ha estallado en Londres, pero se extiende a otras ciudades.
Un joven sujeta un juguete frente a un coche ardiendo, durante los enfrentamientos que se viven en el conflictivo barrio de Hackney, al este de Londres.
Un joven sujeta un juguete frente a un coche ardiendo, durante los enfrentamientos que se viven en el conflictivo barrio de Hackney, al este de Londres.
Kerim Okten / EFE
Un joven sujeta un juguete frente a un coche ardiendo, durante los enfrentamientos que se viven en el conflictivo barrio de Hackney, al este de Londres.

Una violencia extrema se ha desatado por las calles de Reino Unido, sobre todo en Londres, con unos actos vandálicos que han puesto en jaque a la Policía británica y a los responsables políticos del país justo cuando disfrutaban de sus vacaciones. Ya hay varias víctimas mortales, decenas de heridos y cientos de detenciones.

¿Cuál es el origen del conflicto?

Todo comenzó el pasado sábado 6 de agosto durante una pequeña manifestación en las calles de Tottenham, un humilde barrio del norte de Londres. La marcha se celebró en protesta por la muerte el jueves anterior de un hombre de raza negra por un presunto disparo de un agente policial. La víctima era Mark Duggan, de 29 años y padre de cuatro hijos. Falleció en un taxi "por heridas de bala" en un incidente que todavía no ha sido aclarado del todo y que está siendo investigado por una comisión policial independiente. Los primeros exámenes practicados a una bala disparada en este suceso apuntan a que pertenecía a un policía y no a Duggan. También se ha confirmado que la víctima no disparó primero.

¿Qué ocurrió en la primera noche de disturbios?

La marcha, en principio pacífica y celebrada a pocos metros de una comisaría, acabó derivando en una noche de caos y violencia en Tottenham. Varios grupos de jóvenes quemaron edificios y vehículos, saquearon tiendas y lanzaron cócteles molotov, martillos, palos y botellas a la Policía. Hasta 26 agentes resultaron heridos y 48 personas fueron detenidas. Según aseguró un portavoz de Scotland Yard, la manifestación de protesta, de unas 120 personas, fue "secuestrada" por un grupo de "vándalos descerebrados" que iniciaron un duro enfrentamiento con la Policía. Al amanecer, Tottenham parecía más un escenario de guerra que un barrio de una importante capital europea.

¿Por qué en Tottenham?

La crisis económica, la actividad de diversos grupos radicales y un viejo enfrentamiento con la Policía parecen estar detrás de esta oleada de violencia en Tottenham. Se trata de un barrio humilde que reúne al norte de Londres a personas trabajadoras de clase media-baja y de diversa condición racial. Tottenham es una de las zonas de la ciudad con mayor tasa de desempleo y sus vecinos han denunciado en ocasiones el estado de abandono del barrio por parte de las autoridades.

De hecho, estos incidentes no son una novedad en este barrio. Unos disturbios de similar magnitud se vivieron en Tottenham en 1985, cuando otra manifestación pacífica acabó con violentos enfrentamientos con la Policía. Murió un agente y otros 250 resultaron heridos. La violencia también se desató por el fallecimiento de una joven durante una redada policial.

Los disturbios de ahora y los de hace 26 años ponen de manifiesto la tensión existente entre la población, sobre todo de raza negra, y las fuerzas de seguridad. Los vecinos denuncian que la Policía provoca a los jóvenes y que realiza registros indiscriminados a personas teniendo como único pretexto el color de su piel. Así, parece que los agentes son el objetivo principal de los ataques.

¿Cómo se ha extendido la violencia?

Lo ocurrido en Tottenham en la madrugada del domingo se repitió de nuevo en sus calles en la noche siguiente. Un centro comercial fue el principal escenario de los disturbios y acabó saqueado y destrozado. Pero las protestas no se limitaron a esta zona de Londres y se extendió por otros barrios de la capital británica, aunque estos casos no parecen tener relación con la muerte de Mark Duggan. Especialmente significativos fueron los incidentes del lunes en el conflictivo barrio de Hackney (al este de la ciudad), que cuenta con una de las tasas de criminalidad más altas de Reino Unido. De hecho, allí actúa uno de los grupos de jóvenes violentos más notorio de Londres: los 'London Field Boys'.

También se ha palpado la tensión en los barrios de Lewisham, Peckam, Croydon (donde ha muerto una persona), Brixton y Enfield. Por ello, muchas tiendas de la ciudad han decidido no abrir estos días por temor a los saqueos y las calles están menos transitadas de lo normal. La presencia policial también se ha incrementado notoriamente para frenar el caos.

La violencia ha ido más allá de Londres y se ha extendido en otras ciudades del país como Liverpool, Manchester, Nottingham, Leeds, Bristol y Birmingham, con brotes de violencia entre los que se incluyen saqueos, incendios de edificios y coches, destrozos de mobiliario urbano y ataques a comisarías.

¿Han tenido influencia las redes sociales?

Sí. Twitter, Facebook y, sobre todo, la mensajería móvil han sido el vehículo principal para que los jóvenes violentos se coordinaran en sus actos vandálicos. La Policía británica culpó directamente a la red social Twitter de propagar y "avivar" la violencia en Londres mientras varios medios de comunicación apuntaron a los teléfonos de BlackBerry y su servicio de mensajería, muy popular en Reino Unido, como primera herramienta de coordinación entre los alborotadores.

Incluso un joven ha sido arrestado en el condado de Essex (este de Inglaterra) por escribir mensajes incitando a la violencia en Facebook. Las redes sociales están siendo controladas para detectar más usuarios violentos. Internet también es usado por la Policía para subir fotos de los delincuentes, algunas incluso colgadas por ellos mismos en sus cuentas de Twitter y Facebook, para poder identificarlos y arrestarlos cuantos antes.

¿Quién está detrás de los actos vandálicos?

Ningún grupo se ha hecho responsable ni ha reclamado la autoría de los disturbios. De hecho, los actos vandálicos no parecen tener una motivación evidente más que atacar a la Policía.  Las autoridades insisten en que los causantes son simplemente "delincuentes".

Los hechos han reavivado en Reino Unido el debate sobre la creciente incidencia de las bandas juveniles. En barrios londinenses como Tottenham o Hackney abundan grupos de adolescentes que se dedican a amedrentar a los vecinos o a pelear con bandas rivales, según describía recientemente el diario The Guardian.

El aumento del vandalismo y de los comportamientos antisociales se refleja en los datos del Centro para la Justicia Social de Reino Unido, según los cuales el 6% de los menores de 19 años afirman que pertenecen a una banda.

¿Cuántos heridos y muertos hay por los disturbios?

El número de heridos por los disturbios no se ha cuantificado con el paso de los días. Scotland Yard sí ha reconocido que un centenar de sus agentes han resultado dañados. También hay un número indeterminado de civiles heridos. Al tercer día de los disturbios se registró la primera víctima mortal: un joven de 26 años, que fue tiroteado en su coche en el barrio de Croydon (sur de Londres). Un día después, otras tres personas fallecieron al ser atropelladas en Birmingham. También en Londres murió otro joven atacado cuando intentaba evitar un incendio.

¿Y detenidos?

Solo en Londres ha habido más de 900 arrestos y la Policía afirma que "habrá más" tras investigar todas las pruebas, incluidas las imágenes de las cámaras de seguridad instaladas en las calles, para llevar ante la Justicia a todos los responsables de estas actividades delictivas. El comisario en funciones de Scotland Yard, Tim Godwin, hizo un llamamiento a los londinenses para  que identifiquen a los responsables y éstos puedan ser detenidos. Además pidió a los padres que tengan controlados a sus hijos.

En total, hay más de 1.500 personas detenidas en Reino Unido por los disturbios. Además de Londres, las ciudades donde se han registrado más arrestos son Manchester y Birmingham.

¿Cómo han actuado las autoridades?

Muchas han sido las críticas realizadas a las autoridades locales y gubernamentales por "estar de vacaciones" mientras el país vive una de las oleadas de violencia más graves que se recuerdan. Por ello, tanto el primer ministro británico, David Cameron, como la ministra británica del Interior, Theresa May, y el alcalde de Londres, Boris Johnson, han tenido que interrumpir su descanso estival para hacer frente a esta crisis. Volvieron al tercer día del inicio de los disturbios.

Cameron reunió su Gabinete de crisis y prometió que se hará "todo lo necesario" para restaurar el orden en Reino Unido. De momento, se ha decidido ampliar el número de efectivos policiales en las calles de Londres con el despliegue de 16.000 agentes. El Gobierno no prevé medidas más expeditivas como recurrir al Ejército. Sí permitirá el uso de cañones de agua y de bolas de goma contra los violentos, algo que en Reino Unido solo se había realizado en las calles de Irlanda del Norte.

¿Hay precedentes en Europa?

Lo que está ocurriendo en Reino Unido tiene diversas coincidencias con los incidentes registrados en Francia a finales de 2005. Entonces, todo comenzó con la muerte de dos jóvenes musulmanes de origen africano mientras escapaban de la Policía en uno de los suburbios más pobres de París. Ocurrió el 27 de octubre de ese año y supuso el inicio de tres semanas marcadas por la violencia no sólo en París, sino también en otras ciudades del país como Lille, Marsella o Dijón. Incluso hubo otros focos violentos relacionados con estos hechos en otros países como Holanda y Bélgica.

Dos años más tarde, en noviembre de 2007, se produjeron nuevos disturbios en un barrio conflictivo de París también tras la muerte de otros dos adolescentes que viajaban en moto y chocaron con un coche policial. La Policía, de nuevo, era el centro de las protestas.

En diciembre de 2008, Atenas vivió una grave oleada de violencia tras la muerte de un adolescente de 15 años por un disparo de la Policía griega durante unos enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y un grupo de manifestantes. La capital helena se convirtió en una auténtica batalla campal. Los incidentes se han repetido en la ciudad en los dos aniversarios del fallecimiento del joven.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento