La explosión se produjo poco después de las 12.30, en el cuarto piso del número 25 de la calle Canarias, en una vivienda de unos 40 metros cuadrados.

Según Emergencias Madrid, en la cocina de la vivienda había cuatro bombonas de gas butano y propano, y "al parecer una de ellas, de propano, tenía la llave abierta, por lo que el gas se fue acumulando en el aire y, al encender la luz o un electrodoméstico, se produjo la explosión".

El falso techo de escayola de la casa se vino abajo, las ventanas estallaron y también quedó destruido el tabique que la separaba de la casa de al lado.

En el interior de la vivienda se encontraba un hombre de unos 35 años, que fue atendido por efectivos del Samur por contusiones leves en la cara, la cabeza, un brazo y la espalda, y dado de alta en el mismo lugar.

En la vivienda colindante había en el momento de la explosión al menos una joven, que resultó ilesa, aunque manifestó que había recibido el "susto" de su "vida".

La portavoz de Emergencias Madrid aseguró a Efe que ambas personas habían "tenido mucha suerte", a la vista de cómo habían quedado las viviendas.