Un total de 77 casos de melanoma son tratados en el Clínico, que asegura que hay "una cierta estabilidad"

Un total de 77 pacientes con melanoma se han contabilizado en lo que va de año en el hospital Clínico Universitario 'Virgen de la Victoria' de Málaga, lo que supone un aumento del uno por ciento. No obstante, el equipo de Dermatología de este centro sanitario ha asegurado que hay "una cierta estabilidad" en cuanto a la incidencia del cáncer de piel.
Enrique Herrera Acosta, Director Dee La Unidad De Gestiónn De Dermatología
Enrique Herrera Acosta, Director Dee La Unidad De Gestiónn De Dermatología
EUROPA PRESS/
Enrique Herrera Acosta, Director Dee La Unidad De Gestiónn De Dermatología

Un total de 77 pacientes con melanoma se han contabilizado en lo que va de año en el hospital Clínico Universitario 'Virgen de la Victoria' de Málaga, lo que supone un aumento del uno por ciento. No obstante, el equipo de Dermatología de este centro sanitario ha asegurado que hay "una cierta estabilidad" en cuanto a la incidencia del cáncer de piel.

Las revisiones a pacientes con ciertas sospechas de padecer un melanoma se han agilizado en estos últimos años. De esta forma, el tiempo comprendido entre que el paciente acude a la consulta de Dermatología hasta que es operado se ha reducido a menos de 72 horas, como ha afirmado, en rueda de prensa, el director de la Unidad de Gestión de Dermatología del hospital Clínico, Enrique Herrera Acosta.

Asimismo, ha informado de que el número de visitas por parte de los pacientes a estas consultas durante 2010 fue de un total de 37.384, aumentando un dos por ciento con respecto al año anterior.

El principal objetivo por parte de la Consejería de Salud es fomentar la cultura de la prevención del cáncer de piel entre la población. De esta forma, el jefe del Servicio de Dermatología del hospital Clínico, Enrique Herrera Ceballos, ha señalado que son dos los colectivos que deben hacer un uso más frecuente de los protectores solares: los niños y los varones.

En este sentido, "es de vital importancia que las familias fomenten el uso de los fotoprotectores, ya que si se evitan las quemaduras desde la infancia se evita de forma considerable la aparición de cáncer de piel", ha declarado Herrera Ceballos.

Existen dos tipos de carcinomas: el basocelular, que está más claramente relacionado con el sol y que al año registra una prevalencia de 84,9 casos por cada 100.000 habitantes, y el espinocelular, cuya incidencia es más frecuente entre la población, contando con un registro de 18,9 casos por cada 100.000 habitantes.

De este modo, para poder curar las lesiones producidas por el sol es necesario darles una respuesta correcta, que debe ser precoz. Para que un tumor sea detectado a tiempo, el paciente debe pasar por tres tramos: en primer lugar, ha de acudir en su momento al médico; en segundo, éste último lo debe derivar a la zona correcta, y, por último, la enfermedad tiene que ser tratada en el plazo correcto.

Por consiguiente, el responsable de Patología Tumoral No Melanoma, Ricardo Bosh, ha explicado que cuando el paciente llega al servicio de Dermatología todo el proceso está protocolizado. "Es de vital importancia reducir los tiempos máximos que deben transcurrir desde que el paciente es pronosticado hasta que debe ser operado", ha advertido.

Además, el equipo cuenta con una base de datos con toda la información del paciente, ya que es muy importante la existencia del proceso asistencial integrado, que se trata de una serie de criterios que se transmiten a los médicos de familia y de esta forma se conforma una vía de acceso más rápido que una consulta normal.

Terapia fotodinámica

La terapia fotodinámica es, según ha explicado su responsable, Norberto López, una alternativa terapéutica al empleo de la cirugía. De este modo, cuenta con escasos efectos adversos, apenas es invasiva y sus resultados son muy similares al tratamiento quirúrgico.

Desde que se puso en marcha esta terapia, se han llevado a cabo un total de 627 intervenciones, de las que 347 corresponden a lesiones cancerígenas basocelulares y 27 espinocelulares. Asimismo, el resto han sido tratamientos sobre pacientes que presentaban lesiones de daño solar y con queratosis.

Herrera Ceballos ha añadido que, al parecer, según protocolos como el de Kioto, el agujero de la capa de ozono está disminuyendo. Sin embargo, "no está nada claro que lo esté haciendo en zonas donde el sol da con mayor intensidad", como es en el ecuador y en las latitudes altas del hemisferio sur y en las bajas del hemisferio norte.

Por otra parte, Ceballos ha manifestado la actual dicotomía que existe entre el uso de los protectores solares y la vitamina D, ya que la vitamina D3 es "fundamental" para nuestro organismo, impidiendo que el cáncer se desarrolle, sobre todo el que afecta a los órganos internos más que al de piel.

De este modo, el jefe de Servicio de Dermatología ha informado de que, actualmente, existen dos grupos de expertos trabajando en demostrar si realmente merece la pena usar los fotoprotectores para evitar el cáncer de piel o si, por el contrario, es mejor su uso para disminuir las incidencias de cáncer de piel que es más nocivo.

Para concluir, el doctor Herrera Acosta ha realizado una presentación práctica sobre las últimas tecnologías en el estudio de la demografía digital, que permite analizar perfectamente las imágenes de las lesiones, así como guardarlas en una base de datos para compararlas y exportarlas con el objetivo de que otros especialistas puedan aportar su experiencia en relación con el análisis de las mismas.

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