La gran sorpresa de Wimbledon se ha producido este miércoles con la eliminación del suizo Roger Federer en los cuartos de final del Grand Slam de hierba, a manos de Jo-Wilfred Tsonga, en un partido que se solucionó en cinco sets (3-6, 6-7, 6-4, 6-4 y 6-4) tras una magistral remontada del francés.

El suizo no pudo hacer frente al potente saque del galó (18 aces), mucho más constante durante todo el encuentro, que se medirá ahora en semifinales al serbio Novak Djokovic tras acabar con el sueño del joven australiano de 18 años, Bernard Tomic (6-2, 3-6, 6-3 y 7-5), en algo más de dos horas y media.

De esta manera, Federer se despide por segundo año consecutivo a las puertas de la antesala a la final, siendo su verdugo el año pasado el checo Tomas Berdych y tampoco podrá igualar este años los siete títulos de Pete Sampras: "Esto es parte de un proceso. Por alguna razón, ésta va a ser más fácil de digerir que la derrota del año pasado, incluso aunque ésta haya sido en cinco sets", indicó el tenista suizo tras la derrota.

El rival del galo ahora, 'Nole', se encuentra a una sola victoria de coronarse como número uno del mundo, en detrimento de Rafa Nadal, y presenta un balance favorable de 5-2 frente a Tsonga, aunque ante él ya cayó la final en el Abierto de Australia en 2008.

El helvético mostró su calidad desde el inicio y logró romper el potente saque del francés muy temprano, algo que le sirvió para adjudicarse sin apuros el primer set. Lo cierto es que Federer aprovechó mejor sus oportunidades que su rival y basó su juego en el movimiento de Tsonga, mientras éste se centraba en el saque.

Además subía lo justo a la red y acertaba en la creación de punto. Así se llegó al 'tie-break' del segundo, que se llevó el suizo para encarrilar el partido sobre manera, gracias en parte a los errores de Tsonga en los momentos cruciales del partido. Cuestión de tensión, quizá.

Pero el cañón de Tsonga estaba por explotar y Federer comenzó a relajarse más de la cuenta. Juego a juego, el galo mantuvo su servicio y supo aprovechar la efectividad con su volea. Y ano hubo fallos incomprensibles y pudo romper el saque a Federer en el quinto juego. Pero le temblaba la mano en los momentos decisivos y necesitó de hasta cuatro bolas de set para comenzar la remontada.

Se mantuvo la misma tendencia y los errores solo parecían llegar por la parte del suizo. Volvió a llegar la rotura en el quinto juego del cuarto set y la confianza del 'débil' se disparó, más allá de cometer el doble de errores no forzados que su rival (22 sobre 11).

Ya no hubo retroceso y, en el quinto set, Tsonga tuvo de su lado dos bolas de rotura en el primer juego. Sacó partido a la primera. En el décimo, vio aparecer su primera bola de partido y actuó. Ya para entonces su nivel era muy superior al que demostró en un principio, cuando entonces solamente soñaba con vencer al gran Federer.

Por otro lado, Djokovic igualó su mejor resultado hasta ahora en Wimbledon, al superar a Tomic en un disputado partido, que arrancó con un break a favor para el de Belgrado que le valió para asegurarse el primer set.

El tenista australiano pagó la presión de inicio, pero se rehizo en el segundo parcial demostrando por qué fue capaz de apear a Robin Soderling. Desplegó su tenis rompió el servicio a su rival en el cuarto juego (3-1) para igualar el encuentro.

La reacción de 'Nole' no se hizo esperar y se adjudicó siete juegos de corrido para encarar el definitivo set con confianza. Allí ya no hubo sorpresas, pero sí buenos intercambios entre ambos.