Embajada española en Dakar. La resaca del concierto de la noche anterior con Youssou N'Dour no ha hecho mella en la vitalidad de Antonio Carmona. Sentado en una tumbona y entre tapas de chorizo, tortilla y salmorejo, el excomponente de Ketama reflexiona sobre el Festival Afroflamenco, la música africana y su nuevo disco, De noche.

¿Con qué se queda de la experiencia de subirse al escenario con Youssou N'Dour?

Para cualquier músico este viaje es un caramelito. Youssou es un pedazo de artista y un gran expositor de sus raíces. Me he divertido mucho.

¿Cómo ha sentido que se percibe su música aquí, en África?

Es complicado, porque es una cultura muy diferente. Notas una mayor conexión con los temas en los que abunda la percusión, pero las canciones más poperas las entienden menos. Aun así, vi una respuesta muy positiva.

¿Es duro enfrentarse a un público que no conoce ni una sola de sus canciones?

Hombre, duro es picar en una mina... He tocado en tablaos donde nadie sabía nada de mí. Esto ha sido algo, simplemente... distinto.

¿Hay conexión entre el flamenco y la música africana?

La percusión es el nexo de unión entre nuestras músicas. Después del concierto me dijeron que el cajón parecía una percusión africana.

Acaba de publicar su segundo disco en solitario, De noche. ¿Es usted noctámbulo?

Mucho, desde chico. Saco mucho partido a la noche. Cuando todo el mundo duerme, apago los teléfonos y toco la guitarra. Y entonces parece que todo suena de otra forma.

En este disco también han jugado un importante papel los viajes...

Sí, la noche de Egipto fue muy inspiradora. En un paseo en barco por el Nilo compuse Ari Ari. También estuve en la India con Fernando Colomo, donde tuve la oportunidad de tocar con músicos de allí. Todo el disco es un viaje musical.

¿Procura absorber algo de cada músico con el que toca?

Me encanta aprender, soy muy inquieto. Si me gusta cómo toca alguien un piano, me pego a él durante horas. La música es mi gran pasión. Aparte de ella tengo muy pocas aficiones.

A pesar de los viajes, ¿se queda con España?

Me quedo con España. Cuando viajo la echo muchísimo de menos. Madrid, mi gente...

Creo que está enganchado a Twitter. Las redes sociales serán una buena manera de mantener el contacto desde la distancia...

Me parece una gran herramienta para difundir cosas. La utilizo mucho, pero lo hago exclusivamente para eso. Hay otra gente que se implica mucho más, pero hay que tener cierto cuidado y medida con lo que uno publica. En mi caso, me parece muy útil, ya no solo para promocionar a Antonio Carmona, sino toda la cultura del flamenco.

El género vive días dorados a nivel de reconocimiento.

Sí. El flamenco vive un gran momento. Y a nivel musical hay grandes artistas. Gente que va tirando del carro, como el Cigala o Niña Pastori, músicos excepcionales...

¿Qué añora de Ketama?

Los grandes momentos. Tengo un recuerdo muy bonito. Creo honestamente que tuvimos un papel importante en el desarrollo del flamenco.

Habiendo estado tan arriba, ¿cómo ve hoy el futuro de la música?

El futuro de la música está al servicio del artista. Si el artista hace canciones buenas, saldrá adelante. Lo bueno siempre será bueno.