Un hombre identificado por las iniciales E.G.M.B. ha aceptado siete meses de cárcel y una multa de 540 euros por un delito de estafa al arrendatario de una finca de su propiedad en Daimiel (Ciudad Real).

Con el acuerdo alcanzado entre las partes al inicio de la vista oral que se iba a celebrar este martes en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial, el hombre ha reconocido los hechos y ha visto reducida su pena de nueve a siete meses de prisión.

En el escrito de acusaciones señalaba que el 29 de enero de 2002, el acusado y otra persona, V.F.G.N. acordaron el arrendamiento de la finca, fijándose una cantidad de 5.409 euros.

La cantidad debía abonarse en dos plazos, el primero en el día de la firma y el segundo el 28 de agosto de 2002, abonando la mitad de la cantidad en el día del acuerdo y emitiendo el arrendatario un cheque nominativo a favor del arrendador para la fecha establecida.

En el escrito de acusaciones se indica que el 20 de julio de 2004, a sabiendas de que toda la cantidad estaba abonada, y, con ánimo de lucro el acusado presentó una demanda contra el arrendatario por falta de pago.