Quiso ser arquitecto, incluso llegó a licenciarse. Pero el gusanillo del cine era demasiado fuerte. Fernando Colomo dio sus primeros pasos en el mundo del celuloide al margen de la industria, como independiente. Sus primeros cortos, Mañana llega el presidente (1973) o Lola y yo (1974), los hizo junto a Miguel Ángel Díez.Tigres de papel (1977) supuso el debut del madrileño en cintas de larga duración. Desde entonces, la lista no ha parado de engordar, dejándonos en la retina títulos míticos del cine español como ¿Qué hace una chica como tú en un sitio como éste? (1978), La vida alegre (1987), Bajarse al moro (1988), El efecto mariposa (1995) y, más recientemente, Al sur de Granada (2003).