Unos 10.000 olivareros, según los convocantes, la Federación Andaluza de Empresas Cooperativas Agrarias (Faeca) y las organizaciones agrarias Asaja, COAG y UPA, y unas 7.000 personas, según la Policía Local de Córdoba, se manifiestan este viernes en la capital cordobesa para reclamar que se active el almacenamiento privado de aceite.

Sin embargo, el comisario de Agricultura y Desarrollo Rural de la Comisión Europea, Dacian Ciolos, que visita este mismo viernes España, ya ha dicho que no se dan las circunstancias para que la Unión Europea (UE) pueda autorizar el almacenamiento, anuncio éste que ha tenido ya la respuesta por parte del secretario de Organización de COAG-Andalucía, Eduardo López, quien considera que, con esa respuesta a las demandas del sector en España, Ciolos demuestra que es "un cobarde y un farsante".

En declaraciones a los periodistas, López ha asegurado que el comisario europeo de Agricultura "está jugando con los intereses de la economía española, en general, y con los del sector olivarero, integrado por más de 200.000 olivareros y con las más de 2.000 cooperativas y almazaras", poniendo en riesgo los "más 14 millones de empleos que este sector sostiene".

De hecho, según ha argumentado López, "hace dos años, para Grecia y otros países, se activó (el almacenamiento de aceite), pero no porque hubiera bajado el precio del aceite por debajo del nivel que activa el almacenamiento, sino porque había perturbación del mercado", cuando ahora, en España, "los datos indican que no sobra aceite, ya que las importaciones crecen y, sin embargo, hay una caída de los precios, lo cual indica que hay una manipulación del mercado por parte de un oligopolio formado por cuatro grandes empresas, que están manipulando a los consumidores y al sector, de modo que hay razones suficientes y así lo prevé la normativa comunitaria, para activar" el almacenamiento en España.

Por su parte, el secretario general de UPA-Andalucía, Agustín Rodríguez, ha dicho estar convencido de que "el almacenamiento privado llegará", aunque esta es "una medida puntual", siendo precisas otras acciones permanentes respecto a los precios del aceite que pasan por "frenar la posición abusiva" de las grandes distribuidoras aplicando la legislación española, pues "las ventas a pérdidas y las subastas a ciegas se tienen que terminar, ya que no es posible seguir reventando, oferta tras oferta, un producto de primera calidad y del que depende buena parte de las rentas de más de 300 pueblos en Andalucía".

También es necesario, según ha subrayado Rodríguez, que "las cooperativas tienen que ejercer la unidad en el mercado, ya que hay que contrarrestar esa política abusiva de los cinco que compran (aceite a los agricultores), de las grandes distribuidoras, con la creación de cinco o diez grandes grupos (que comercialicen el aceite) que permitan defender con eficacia el precio del aceite de oliva y, a partir de ahí, la rentabilidad, porque es un problema también de estructuras de mercado, ya que hay un desequilibrio entre la distribución, con son cinco los que compran, y la producción, que con 1.700 los que venden".

En este sentido, desde Asaja, su presidente provincial en Córdoba, Ignacio Fernández de Mesa, al margen de reclamar el almacenamiento privado, entiende que "hay que entrar en el mundo del comercio" y acabar con "las ventas a pérdidas", además de, en el ámbito de la UE, "defender un presupuesto justo para la agricultura", siendo también preciso "controlar los gastos" que conllevan para los agricultores "la subida espectacular de la electricidad de los últimos años, lo mismo que la de los tributos sobre el gasóleo".

Finalmente, el presidente de Faeca-Córdoba, Salvador de Prado, se ha puesto a sí mismo, como olivarero, de ejemplo de las dificultades que atraviesa el sector, pues el pasado año le pagaron el aceite "a 1,56 euros el kilo, y con eso no podemos vivir, es que no se puede ni recoger la aceituna", como lo demuestra "un estudio del Ministerio (de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino) que ha fijado el umbral de rentabilidad para el olivarero en 2,49 euros" como precio de venta por kilo de aceite.

De Prado, por otro lado, ha recordado que la de este viernes es la segunda movilización conjunta del sector, como resultado de las negociaciones en Madrid de organizaciones agrarias y cooperativas para llevar a cabo una campaña conjunta de movilizaciones. Dicho plan, que se inició el pasado 18 de marzo con una manifestación en Jaén, incluye manifestaciones, además de la de este viernes en Córdoba, en Toledo (15 de abril) y En Mérida (29 de abril), sin descartar otras convocatorias que se puedan consensuar.

El objetivo principal que persiguen estos actos reivindicativos es denunciar la dramática situación por la que atraviesa el sector del aceite de oliva, que sufre una caída de renta por quinto año consecutivo y registra los precios más bajos de la última década.

Una coyuntura que afecta a 500.000 olivicultores españoles y a un sector, el del aceite de oliva, que genera anualmente 25 millones de jornales, dependiendo económicamente de él muchas zonas rurales del país, principalmente de Andalucía, donde se concentra más del 80 por ciento de la producción.